En España los sindicatos han pedido al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que en el próximo consejo de la UE a finales de este mes, defienda que se dé un giro a las políticas que se están practicando en favor del crecimiento y el empleo y que no preste atención a los que quieren que desaparezca la legislación laboral están debilitando el sistema público de pensiones.
La manifestación culmina la semana de movilizaciones convocadas por la Confederación Europea de Sindicatos (CES) en toda la UE con el lema «Por el empleo y la protección social. Por una Europa más social y democrática».
En el manifiesto leído al final de la concentración, se dice que es «palpable» el fracaso de las políticas económicas en la UE, que no han hecho más que agravar los problemas que ya existen y crear otros nuevos.
Citan el informe en el que economistas del FMI reconocen el fracaso en el diseño del rescate de Grecia y dice que las políticas que se aplican obedecen a una «ideología concreta» que está llevando a Europa a un «suicidio económico» y a un desastre social» de proporciones incalculables.
El manifiesto señala que los resultados son malos en Europa, pero que en España son «dramáticos» con 6,2 millones de parados, seis de cada diez jóvenes que no encuentran empleo, dos millones de hogares con todos los miembros en paro y el 27 % de la población en el umbral de la pobreza.
Los sindicatos europeos, instan a los líderes políticos a que den un cambio de rumbo en el Consejo europeo de los días 27 y 28 próximos y a las instituciones europeas a que «se sacudan su incapacidad manifiesta» a oponerse a los «dictados» de Alemania.
Piden de forma urgente un plan de choque de inversiones, planes de empleo para los jóvenes y financiación para las empresas garantizada por los estados y por el BCE todo con una «fuerte dimensión social».
