La organización que convocó la huelga del sector lácteo, la EMB (Asociación Europea de Productores de Leche), ha anunciado en un comunicado que los ocho países que comenzaron la huelga la van a interrumpir y servirán de nuevo leche. Creen que los políticos nacionales y europeos dan señales de querer buscar soluciones a la crisis de los precios.
Pascal Massol, presidente de la organización francesa de productores de leche APLI, ha asegurado que la clase política «se mueve» por lo que los ganaderos suspenderán la huelga por el momento «pero la retomaremos si no hay decisiones políticas para acabar con la situación insoportable del mercado».
Los productores gallegos se unieron a la protesta y hace dos días derramaron 60.000 litros de leche para decir que producir les cuesta más de los que reciben por ella. Los ganaderos piden que se regule la producción a escala europea, para garantizar precios justos tanto en origen como al consumidor.