Como parte del proceso, la compañía Cisco Systems equipó a la Secretaría General con una sofisticada red telefónica que tendría la capacidad de registrar los datos y rastrear todas las llamadas hechas y recibidas por el personal y los diplomáticos en cualquier parte de la sede. «Si la administración de la ONU quiere interceptar las comunicaciones, ahora estará capacitada para hacerlo, violando así la privacidad», explica una fuente del foro mundial familiarizada con la nueva red.
Por su parte, la presidenta del Sindicato del Personal de las Naciones Unidas, Barbara Tavora-Jainchill, señala que «sí, tenemos este nuevo sistema telefónico, pero nunca habíamos escuchado que tuviera esa capacidad». «Si es así, creo que la administración de la ONU debería actuar inmediatamente para que la información que intercambien el personal y los diplomáticos por teléfono o por Internet esté plenamente protegida y se mantenga en privado».
La funcionaria explica que cada extensión de la nueva red telefónica tiene un código de acceso personalizado, que debe marcarse para realizar una llamada al exterior. Los miembros del personal autorizados a hacer llamadas de larga distancia también deben especificar si la comunicación es por motivos de trabajo o personales. En este último caso, el funcionario debe abonarla por su cuenta.
Martin Nesirky, portavoz de la ONU, señala que «la Secretaría efectivamente ha actualizado su sistema telefónico con una 'telefonía IP', con equipamiento y tecnología de Cisco». El funcionario explica que el sistema asegura la convergencia de toda la infraestructura interna de comunicaciones de voz y datos, ahorrando así dinero e integrando la red telefónica a los sistemas de tecnologías de la información.
Nesirky insiste en que esta nueva red no incluye ningún método de «monitoreo» que no existiera ya en el anterior sistema analógico, y tampoco prevé una función para «vigilar el tráfico de Internet». Sin embargo, admite que «la Secretaría ya registra los datos de conexión de las llamadas entrantes y salientes, con el fin de calcular la facturación, resolver problemas, realizar diagnósticos y análisis estadísticos, y optimizar el rendimiento».
Esa vigilancia, aclara, se realiza de acuerdo con un memorando de 2004 del entonces secretario general Kofi Annan, titulado «Uso de información, recursos de tecnología de la información y datos». La investigación de IPS motivó que se planteara el tema en una conferencia de prensa en la sede de la ONU este martes, pero los representantes de la Secretaría General evitaron dar más información y se remitieron a las respuestas ya dadas por Nesirky.
La fuente vinculada con el nuevo sistema telefónico explica que los datos registrados son un verdadero tesoro, pues incluyen el historial detallado de todas las llamadas salientes y recibidas en el edificio. Con esta nueva red, averiguar la actividad telefónica de una persona en particular es fácil. La fuente también dijo ignorar quién tenía acceso a esos registros y qué nivel de confidencialidad se aplicaba.
«Es fácil asumir que todas las llamadas son monitoreadas, y que si no quieres que nadie sepa que estás llamando a alguien es mejor que no uses esos teléfonos y utilices tu celular o (el programa de llamadas por Internet) Skype», añade. El sitio web del periódico alemán Der Spiegel informó la semana pasada que técnicos de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) de Estados Unidos descifraron el acceso al sistema interno de teleconferencias de vídeo de la ONU como parte de un programa de espionaje al foro mundial. El diario reveló que la agencia también interceptó comunicaciones internas de la oficina de la Unión Europea en Estados Unidos.
En su artículo titulado «Cómo Estados Unidos espía a Europa y a la ONU», Der Spiegel señala que, en las tres semanas que duró ese pinchazo, el número de comunicaciones interceptadas por la NSA se incrementó de 12 a 485. Mientras, se publicaron informes de que piratas informáticos pincharon también equipos de Cisco Systems en otras oficinas.
Un artículo publicado en enero por Dan Goodin, editor del sitio web sobre tecnología e información Ars Technica, reveló que los teléfonos de Internet que vende Cisco Systems son vulnerables a acciones de «hackers», que los pueden convertir en dispositivos remotos de espionaje para escuchar llamadas privadas y conversaciones cercanas. La empresa advirtió esa vulnerabilidad casi dos semanas después de que un experto en seguridad demostrara que cualquier persona con acceso físico a los teléfonos podía ejecutar códigos maliciosos (programa informático que se instala en un equipo mediante engaño).
Cisco tiene previsto lanzar un parche de software para cubrir esta vulnerabilidad, que afecta a varios modelos de su teléfono CiscoUnified IP Phone 7900. Se trata del último recordatorio de la amenaza a la privacidad que suponen los nuevos teléfonos, ordenadores y otros dispositivos de comunicaciones, sostiene el artículo de Ars Technica. Y advierte que al ser susceptibles a la acción de piratas informáticos, pueden convertirse en herramientas de espionaje.