Del porcentaje adicional que España tiene que precisar, el Consejo considera que más de la mitad podría lograrse respetando el techo de gasto fijado por el Gobierno español para el presupuesto de 2011. El 0,75% que resta procederá de las Comunidades autónomas. España tiene hasta 2013 para volver a situar el déficit por debajo del 3% del PIB que marca la legislación europea como disciplina presupuestaria.
El Ecofin, ha respaldado también los esfuerzos de los otros doce países que tienen abiertos procedimientos por déficit excesivo y ha abierto otros a Chipre, Dinamarca, Bulgaria y Finlandia.
Con esta decisión sólo tres Estados miembros, Estonia, Luxemburgo y Suecia, han conseguido mantenerse por debajo del 3% del déficit.
Esa estabilidad económica es la que va a permitir a Estonia entrar a formar parte del club del euro a partir de 2011, los ministros del Ecofin han fijado la tasa de cambio, irrevocable, en 15,6466 coronas estonias por euro.
Por su parte la ministra española de Economía y Hacienda, Elena Salgado, ha anunciado que en los próximos días pedirá «por precaución» a la Comisión Europea una prórroga de la autorización del Fondo de reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), que venció el pasado 30 de junio para cubrir posibles necesidades de capital que se puedan detectar en las pruebas de estrés a los bancos y cajas de ahorro españolas. En todo caso ha añadido que el Fondo, dotado con 99.000 millones de euros será «muy sobrante» para las posibles necesidades de las entidades financieras.
El próximo 23 de julio cada entidad publicará el resultado de su prueba de estrés. Los supervisores nacionales presentarán los datos agregados a cada país, mientras que el Comité Europeo de Supervisores Bancarios (CEBS) hará lo propio con los datos a nivel comunitario. Los resultados incluirán los mismos datos en todos los países: el capital básico; los activos ponderados por riesgo; las pérdidas en activos financieros, distinguiendo entre familiares y empresas; otras pérdidas; el capital resultante después de las ayudas públicas recibidas y la exposición a deuda soberana.