La Unión Europea acaba de hacer público su informe sobre el Empleo en Europa 2009, en el que se puede apreciar que la crisis financiera está pasando factura a los mercados de trabajo ya que se están perdiendo la mayor parte de los empleos que se habían conseguido desde el año 2000.
Los hombres, los jóvenes, los trabajadores poco cualificados y los que tenían contratos temporales son los que se han llevado la peor parte. Desde el comienzo de la crisis se han perdido en la UE más de 4 millones de puestos de trabajo a pesar de que los efectos se han paliado en parte por una serie de medidas que han tomado los gobiernos como la reducción de las jornadas laborales, entre otras.
El informe analiza detalladamente dos cuestiones fundamentales en el futuro: movilidad en el trabajo y repercusiones del cambio climático en el mercado laboral.
La movilidad ha sido una nota a destacar en los últimos años. Un 22% de europeos ha cambiado de trabajo e incluso de país, en España un 25%.
Por otra parte el cambio climático va a tener una gran influencia en el mercado de trabajo, los esfuerzos que está haciendo la UE para convertirse en una economía competitiva con bajas emisiones de carbono van a agilizar la oferta y la demanda, aunque otros empleos ya existentes se van a destruir.