Su lema es «La voz de España en los cinco continentes» y su audiencia, incontable, millonaria. Hablamos de Radio Exterior, emisora perteneciente a Radio Nacional de España (RNE), que lleva informando de lo que ocurre tanto dentro como fuera de nuestro país desde el 15 de marzo de 1942. Desde hace poco más de tres años, la actualidad europea que más nos afecta también tiene un hueco en su programación gracias al programa «Europa Abierta». Carlos Navarro, Guillermo Bontoux y Nuria Sans, realizan de lunes a viernes un recorrido por la actualidad del viejo continente donde tienen cabida todo tipo de temas económicos, políticos y sociales.

euroXpress entrevista a Nuria Sans, directora de «Europa Abierta» de Radio Exterior.

¿Cómo surgió abrir los micrófonos de Europa Abierta?

Nuria Sans.- Europa Abierta está en marcha desde septiembre de 2011. En Radio Exterior de España hay programas dedicados a América, Asia y África desde hace muchos años por la vocación de la emisora de servicio público y para los oyentes españoles en esos continentes, que nos escuchaban a través de la Onda Corta. Hacía falta un programa dedicado a Europa, y así lo decidió la directora de entonces, Josefina Beneitez y la dirección del programa la asumió Chema Forte, actual director de Radio 5 Todo Noticias. La intención era dar a conocer todas las vertientes de las instituciones europeas, la política, la social, la cultural...

eXp - Son pocos los programas de radio que hablan de la actualidad de Europa y de la UE, a menudo limitada a pequeñas piezas en informativos nacionales, ¿por qué cree que es importante espacios como estos?

N.S.- Como nos esforzamos en dar a entender, por Europa, ahora mismo, pasa todo. Ahí está el interés de un programa como éste. Y no siempre son malas noticias como parece. Europa se construye cada día con pequeños gestos y pequeños detalles. Nos hemos acostumbrado a utilizar el euro o que los jóvenes puedan disfrutar de becas Erasmus, nos hemos acostumbrado a no necesitar el pasaporte para viajar por Europa. Todo ello y mucho más nos da la imagen de porque es tán importante hablar de una forma positiva de Europa.

Nuestro programa se emite todos los días de lunes a viernes de 12 a 13 horas de la mañana, y se puede sintonizar a través de la pagina web www.rtve.es. Después del programa, lo colgamos en los podcast de esta misma página.

eXp- Metiéndonos ya de lleno en temas europeos que tratáis desde Europa Abierta, ¿cree justificadas las críticas de cómo se está gestionado la crisis económica en Europa y más concretamente en la UE?

N.S.- Desgraciadamente, hemos tenido que comentar en numerosas ocasiones el ensimismamiento de Europa respecto a la crisis. La toma de decisiones es lenta y a golpe de crisis, así que se ha tenido que ir arrancando movimientos, en su mayoría, lentos y renqueantes. El poder de Alemania en la toma de decisiones ha frenado cualquier iniciativa más audaz, y mientras, lo han pagado los ciudadanos de los países con más problemas, desde Portugal hasta Grecia, pasando por España y otros de los que se habla menos como Irlanda o Estonia.

eXp- Las noticias malas sobre Europa parecen eclipsar a las buenas, ¿refleja una realidad o una tendenciosidad «para vender titulares» por parte de los medios?

N.S.- En el periodismo hay una frase que dice 'good news, no news' ('buenas noticias, no son noticia'). Antes ya hablábamos de las bondades de la Unión Europea, realidades que están ahí, pero que han tardado mucho tiempo en poder ser disfrutadas. Los mecanismos comunitarios son muy lentos y cuando hay alguna decisión que puede suponer un beneficio para el consumidor, por ejemplo, todavía tardará en ser efectiva. Así es muy difícil hacer información periodística. Y las cuestiones más llamativas, las que venden titulares, se sitúan por delante de las otras.

eXp- Cuando hablamos de Europa nos olvidamos de que hay pequeños países, como los del este del continente, donde también ocurren cosas pero que no salen en medios de comunicación, ¿cree que hay una desigualdad informativa sobre temas europeos?

N.S.- Por supuesto. Ocurren cosas que no aparecen en los medios de comunicación españoles, o franceses o británicos. En ese sentido hay que hacer una reflexión sobre la información que se ofrece en estos países. Se trata de información que nos resulta más cercana o nos interesa más. Así que lo nos llega desde Letonia o Bulgaria, salvo un notición, tiene escaso eco en los medios de comunicación españoles.

eXp.- ¿Eclipsan los titulares políticos y económicos del continente a los de corte social y humano? ¿Manda demasiado la información procedente de Bruselas respecto a la de Europa en su conjunto?

N.S.- Si. En general, en los últimos años, la economía en concreto ha protagonizado la información que nos llegaba desde Bruselas, desde las instituciones europeas. Pero volvemos a la cuestión del interés: realmente el interés del ciudadano está en cómo se soluciona o no la crisis. Es evidente que la información que nos llega desde Bruselas, de las instituciones comunitarias prima sobre otros asuntos europeos.

eXp.- Si tuviera que destacar cinco cosas buenas y cinco no tan buenas de la Europa actual donde vivimos, ¿qué destacaría?

N.S.- Me gusta sentirme europea, pertenecer a un grupo de países en los que prima la democracia, la paz y los derechos humanos. Me parece muy práctica la moneda única, más allá de los problemas que tenga y de las equivocaciones que tuvo en su puesta en marcha. Es genial que los jóvenes puedan disfrutar de las becas Erasmus, lo que les abre la mente al mundo. También es muy útil el espacio Schengen, de forma que no necesites el pasaporte para viajar a la mayoría de los países europeos. Y me siento segura por los controles que hay en cuestiones como la alimentación o la medicina.

Pero me preocupa el aumento de la extrema derecha en países como Francia o Grecia. Tampoco me gustan los populismos y los euroescépticos. Ahora que hablamos tanto de la inmigración, no me gusta que Europa mire hacia otro lado y piense solo en decisiones defensivas. En ese sentido, no me gusta que Europa no tenga una política exterior de mayor importancia. No podemos depender de lo que hagan Francia, Reino Unido o Alemania, que al final primaran en sus propios intereses.

Y no me gusta que las decisiones se tomen de una forma tan lenta, como decía antes, a golpe de crisis, porque estamos dejando que, en política exterior las decisiones las tome Estados Unidos, y en la economía, China se está poniendo por delante en todo.

eXp.- Las relaciones de la Unión Europea con Rusia son tensas, ¿qué falla por ambas partes? ¿cree que habrá algún día algún entendimiento o no se dará, como opinan muchos, hasta que Putin salga del poder en Rusia?

N.S.- Aunque en España demos una imagen de Putin como de autoritario, cabe recordar que fue elegido democráticamente, aunque haya quien ponga en duda la validez de esa democracia, y está devolviendo a los rusos el orgullo que perdieron tras la caída de la Unión Soviética. Quizás hasta que los europeos no asuman eso, no habrá posibilidades de acercar posturas, pero tampoco cabe descartar que haya alguna mejora de las relaciones si a ambas partes les interesa.

eXp.- ¿Está haciendo Europa todo lo que puede respecto a los inmigrantes que cruzan el Mediterráneo? Y otra crítica que se le hace –aunque en otra dirección, obviamente, ¿se muestra impasible frente al avance de los actos terroristas del EI? ¿Es en realidad Europa un sujeto casi impasible o actúa discreta pero contundente?

N.S.- No, Europa no está haciendo todo lo que puede, pero tras la cumbre del jueves, parece que vamos avanzando.

Por lo que se refiere al Estado Islámico, en primer lugar, Europa debe hacer una reflexión sobre el papel que ha tenido en el aumento de la violencia en Irak y Siria y en el derrocamiento de Gadafi en Libia. Ahora, cualquier solución es mala. No puede enviar tropas sobre el terreno, pero tampoco puede hacer como que no ocurre nada en Irak y Siria.