Los 27 cenan juntos esta noche en Bruselas para intentar que la UE tenga una sola voz en la próxima cumbre del G-20 en Pittsbourg, a finales de mes. El planteamiento es que estamos ante los primeros síntomas de estabilización, pero sin garantías de que la economía mejore si se retiran los estímulos que los Estados han venido impulsando.
El Comisario de Asuntos Europeos, Joaquín Almunia, alerta una y otra vez de que el paro y las debilidades del sistema financiero exigen precauciones. Propone mantener las medidas de apoyo y diseñar ya una estrategia de salida de la crisis, sin olvidarse de avanzar en la supervisión del sistema financiero internacional.
Este último punto será uno en los que hará hincapié el presidente del gobierno español. Zapatero pedirá a sus socios reformas del sistema financiero y que los estímulos fiscales de los Estados se retiren de forma planificada. Para España es importante que se mantengan las ayudas al desempleo y las medidas sociales.
El presidente francés, Nicolás Sarkozy, y el primer ministro británico, Gordon Brown, ya han dicho que quieren "cifras, calendarios y compromisos".
El presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso, propondrá destinar 15.000 millones de euros para ayudar a los países pobres en la lucha contra el cambio climático. Sarkozy y Brown llevan una propuesta común para facilitar un acuerdo en la cumbre de la ONU de diciembre. euroXpress