En la última encuesta sobre cibercriminalidad hecha por Eurobarómetro que se acaba de conocer, el número de europeos que se considera bien informado sobre los riesgos de la ciberdelincuencia ha aumentado desde la anterior encuesta en 2012, pero no todos toman medidas. Un ejemplo es que menos de la mitad de los usuarios de la red cambió alguna de sus contraseñas durante el año pasado, así y todo fueron más que en el año anterior (un 48 % frente al 45 %).
Según la comisaria de Interior, Cecilia Malmström «la encuesta muestra que, desgraciadamente, la ciberdelincuencia sigue afectando negativamente a nuestra economía. Es necesaria la cooperación de todos los actores para dar una respuesta eficaz a este fenómeno, a fin de garantizar que tanto los ciudadanos como las empresas aprovechen al máximo las posibilidades que ofrecen las tecnologías digitales. Pero no olvidemos que muchos incidentes podrían prevenirse si los usuarios adoptasen una serie de medidas sencillas y poco costosas».
En la encuesta en la que han participado más de 27.000 personas de todos los Estados miembros, se pone de relieve que: el 87 % de los encuestados evita desvelar datos personales en línea. Lo más preocupante es que son algo menos que en la encuesta de 2012 (89 %).
El 12 % de los usuarios de internet ha visto cómo su cuenta de correo electrónico o de una red social ha sido pirateada, y el 7 % ha sido víctima de un fraude bancario o con tarjetas de crédito en línea.
Ha aumentado notablemente el número de usuarios que acceden a internet a través de teléfonos inteligentes (del 24 % al 35 %) o de tabletas digitales o pantallas táctiles (del 6 % al 14 %).
El Centro Europeo de Ciberdelincuencia, trabaja para combatir esta forma de delito y coopera con las fuerzas de seguridad de los Estados miembros y de otros países.