El-Fattah y otros treinta civiles fueron detenidos después de duros enfrentamientos en la ciudad de Maspero. Todo comenzó con una manifestación pacífica para reivindicar los derechos de los coptos y terminó con una refriega que produjo más de 25 muertos y 300 heridos.
El bloguero, que ya fue detenido por el régimen de Mubarak, por pedir independencia judicial, no quiso contestar a las preguntas del tribunal militar que le juzgaba, diciendo que solo lo haría ante un tribunal civil imparcial. Está acusado de incitación a la violencia contra las fuerzas armadas, actuar contra el personal militar y degradación de bienes militares.
El parlamento europeo exige una investigación independiente sobre los sucesos de Maspero y hace un llamamiento a las autoridades egipcias para que ningún bloguero, periodista o defensor de los derechos humanos sea intimidado de ninguna manera.
Según las organizaciones de derechos humanos, en Egipto más de 12.000 civiles han sido juzgados por tribunales militares desde marzo el pasado marzo.
En cuanto a Irán el Europarlamento denuncia que los derechos humanos se degradan cada vez más. El número de presos políticos aumenta, así como las ejecuciones en las que se incluye a menores, se practica la tortura y se piden cantidades desorbitadas como fianza. Hay una estricta restricción de la libertad de expresión, la libertad de información, asociación, creencia, enseñanza y circulación.