Después de dos elecciones que han tenido en vilo a Europa, Nueva Democracia y PASOK podrán formar una coalición similar a la que negoció los planes de austeridad que tanto están haciendo sufrir a los griegos. Antonis Samaras, ha dicho que «el pueblo heleno ha votado hoy por la permanencia del país en la eurozona y a favor de las fuerzas políticas que traerán desarrollo y empleo».
La formación de izquierda radical, Syriza de Alexis Tsipras, que propugnaba políticas de crecimiento ha quedado en segundo lugar.
Nueva Democracia ha conseguido un 29,5 por ciento de los votos que le dan 128 escaños en el Parlamento. La coalición de la Izquierda Radical, SYRIZA, ha obtenido un 27,1 por ciento de los votos y 72 diputados. PASOK el 12,3 por ciento y 20 diputados, los neonazis de Amanecer Dorado, el 7 por ciento y 18 diputados, Izquierda democrática, el 6,2 por ciento y 17 diputados y el partido Comunista griego (KKE), el 4,5 por ciento y 12 diputados.
Antonis Samaras, ha dejado claro que los griegos han optado por el euro, y ha invitado a «las fuerzas que comparten estas convicciones» a participar en un gobierno de salvación nacional. Ha asegurado que el pueblo griego ha votado «por el empleo, la justicia y la seguridad» y ha terminando diciendo «no más aventuras» en clara referencia a SYRIZA, el segundo partido más votado.
El resultado de estos comicios permitirán a socialistas y conservadores formar un gobierno de coalición muy semejante al que hicieron tras la renuncia de Giorgos Papandreu, en noviembre de 2011, que fue el que negoció el segundo plan de rescate con la troika de 130.000 millones de euros. En total las ayudas que hasta ahora ha necesitado Grecia suman 347.000 millones de euros.
Los líderes europeos del G20 que habrán conocido estos resultados camino de México habrán respirado tranquilos.