La producción de acero en España ha crecido un 1,4% en la primera mitad de 2014 en relación al mismo periodo del año anterior, alcanzando los 7,5 millones de toneladas. Tras un comienzo de año más positivo, que abarcó todo el primer trimestre, en el segundo la actividad se ha estabilizado con un descenso apenas perceptible.
Si tomamos los doce últimos meses –julio 2013 a junio 2014-, la producción estaría situada en 14,3 millones de toneladas, una cifra que comparada, por ejemplo, con el dato anual de 2010 es un 13% menor o un 25% menor si lo hacemos con la cifra récord de 19 millones de toneladas del año 2007.
Ligero crecimiento del 2,1% en las entregas al mercado
En el volumen de toneladas entregadas al mercado se aprecia una evolución similar a la de la producción. La primera mitad del año se ha cerrado con una subida del 2,1% en comparación con el mismo periodo de 2013. Si analizamos lo que va del año, tras un primer trimestre con crecimiento interanual del 8,2%, en el segundo se ha producido una bajada del 3,2%.
Pese a que el mercado nacional vive una situación mejor que la de años anteriores, el crecimiento de las entregas se ha debido aún a la actividad exportadora, -pese a que a futuro parece crecer la incertidumbre en este sentido-, que ha subido un 5,4%.
Las entregas en el mercado nacional se acercan a la estabilización pero siguen descendiendo un 1,5% interanual en este primer semestre ya que las importaciones están beneficiándose también de la subida de la demanda.
En cuanto a las toneladas importadas, en la primera mitad del año se ha visto un crecimiento del 10,3%.
El consumo de acero podría crecer un 2% en 2014, pero aumenta la incertidumbre sobre las exportaciones
Coincidiendo con mayores dificultades en las exportaciones, se prevé un ligero crecimiento de la demanda nacional. La Contabilidad Nacional del segundo trimestre muestra un cambio en el patrón de crecimiento, con la demanda interna positiva y menor contribución de las exportaciones al crecimiento. El sector siderúrgico, muy relacionado con todas las ramas de la economía, sigue este mismo esquema. Así, se calcula que el consumo real de acero de 2014 podría crecer cerca de un 2% interanual. Por el contrario, existen más incertidumbres sobre lo que vayan a hacer las exportaciones de aquí a final de año.