La población de Siria es «víctima de la peor crisis humanitaria de nuestro tiempo», aseguró el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, cuando solicitaba fondos para esa causa a 78 donantes potenciales en el palacio Bayan de la capital de Kuwait.
Cuatro de cada cinco sirios viven en la pobreza, la miseria y las privaciones, aseguró Ban este martes 31, en la tercera conferencia internacional de donantes para la ayuda humanitaria de Siria, celebrada en este país del Golfo.
Y el país en una guerra civil, que cumplió su cuarto año el 15 de marzo que no parece que vaya a cesar, ha perdido casi cuatro décadas de desarrollo humano, afirmó.
Una guerra despiadada e implacable está destruyendo a Siria, continuó. «La violencia ha dejado a tantos sirios sin hogar, sin escuelas, sin hospitales y sin esperanza», agregó Ban.
Aún así, su petición de ayuda humanitaria ha estado lejos de cumplir su meta de 8.400 millones de dólares, a pesar de los esfuerzos de tres grandes donantes. La Unión Europea (UE), y sus estados miembros han aportado casi 1.000 millones de dólares, Estados Unidos ha contribuido con 507 millones y Kuwait con 500 millones.
Varias organizaciones internacionales no gubernamentales (ONG), como la Fundación de Ayuda Humanitaria, de Turquía, la Media Luna Roja de Qatar y la Organización Internacional de Caridad Islámica, de Kuwait, se comprometieron conjuntamente a donar 500 millones de dólares.
En total, la tercera conferencia internacional de donantes ha conseguido recaudar solo unos 3.800 millones de dólares de los 8.400 millones previstos para la ayuda humanitaria de Siria.
Sin expresar su decepción, Ban dijo que los compromisos asumidos en la conferencia significarán una profunda diferencia para los cuatro millones de sirios que buscaron refugio en los países vecinos y para los cinco millones que siguen atrapados sin comida ni ayuda médica en zonas sitiadas, de difícil acceso, en el país devastado por la guerra.
El jefe de la ONU también elogió al emir de Kuwait, el jeque Sabah Al Ahmad Al Jaber Al Sabah, por hospedar la conferencia de donantes por tercer año consecutivo.
La primera conferencia en 2013 recibió promesas de ayuda por 1.200 millones de dólares y la de 2014 unos 2.400 millones de dólares, siendo Kuwait el principal donante en ambas. «El de Kuwait es otro ejemplo del liderazgo vital, que salva vidas, que ayuda a aquellos en necesidad extrema en todo el mundo», añadió, calificando al emir como uno de los «líderes humanitarios» del mundo.
En su discurso, el emir criticó implícitamente a los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad, China, Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña y Rusia, por su fracaso colectivo al no lograr una solución política en Siria. «La comunidad internacional, y en particular, el Consejo de Seguridad, no ha conseguido encontrar una solución que ponga fin a este conflicto... preserve la sangre de nuestros hermanos y mantenga la unidad de un país, que fue herido por las garras de la discordia y desgarrado por los colmillos del terrorismo», agregó.
Valerie Amos, subsecretaria general para asuntos humanitarios y coordinadora de ayuda de emergencia, dijo que la población ha soportado «niveles sobrecogedores de violencia y salvajismo en Siria». «Aunque no podemos llevar la paz, esta financiación ayudará a las organizaciones humanitarias a entregar... alimentos, agua, refugio, servicios de salud y prestar otro tipo de ayuda a millones de personas en necesidad urgente.
Tras anunciar el compromiso de la UE, el comisario europeo de Ayuda Humanitaria y Gestión de Crisis, Christos Stylianides, declaró que la situación en Siria se agrava a diario y es cada vez más difícil para las organizaciones humanitarias llegar hasta los más necesitados.
Desde que comenzó la guerra civil en marzo de 2011, más de 11,5 millones de sirios se han visto obligados a huir de sus hogares, incluidos 3,9 millones que huyeron a los países vecinos. Más de 12 millones de personas necesitan asistencia humanitaria urgente en el territorio sirio, un aumento de un 30 por ciento en comparación con el año pasado, destacó. Los sirios han buscado refugio en Líbano, Jordania, Iraq, Turquía y Egipto, entre otros países.
Andy Baker, director del programa regional de la organización humanitaria Oxfam, con sede en Jordania, nos dijo que la conferencia «no es un juego de números» sino que se trata de vidas humanas. Las personas atrapadas por el conflicto tienen que asumir decisiones difíciles, como tomar un barco para huir a Europa, pedirles a sus hijos que ganen su sostén o acordar matrimonios precoces para sus hijas. «La mejor opción para ellos es tomar ese barco», expresó.
En un análisis de lo que serían donaciones justas, Oxfam calcula que casi la mitad de los mayores donantes del mundo no dieron lo que les correspondía en 2014, según el tamaño de sus economías, como Rusia, con apenas un siete por ciento, Australia, un 28 por ciento, Japón, con un 29 por ciento.
Los gobiernos que sí aportaron una cuota justa o más fueron Kuwait, con el 1.107 por ciento, Emiratos Árabes Unidos, con el 391 por ciento, Noruega,el 254 por ciento, Gran Bretaña, el 166 por ciento, y Alemania, el 111 por ciento. Estados Unidos aportó un 97 por ciento de lo que le correspondería.