Sólo el 25% de las mujeres de la región mediterránea trabajan
En los últimos 30 años, el número de mujeres trabajadoras en los países del sur del Mediterráneo ha aumentado un 0,17%, y sólo el 25% de las mujeres en la región tienen trabajo o lo buscan de forma activa. Para el Secretariado de la Unión por el Mediterráneo (UpM), es necesario conseguir una mayor participación de mujeres y jóvenes en el ámbito socio-económico para construir sociedades económicamente prósperas y socialmente estables.
Luma Sukarieh, es un joven licenciada jordana, que junto con otras compañeras trabajan en un proyecto denominado «Green glass», una empresa que se dedica al reciclaje de vidrios en el país árabe y que tiene un triple objetivo: preservar el medioambiente, dar trabajo a mujeres desempleadas y revertir parte de los beneficios en apoyo a orfanatos. Su proyecto ha recibido el premio de AFAEMME (Asociación de organizaciones de mujeres empresarias del Mediterráneo) que la presenta como un ejemplo de la necesidad de empoderar a las mujeres para que accedan al mercado laboral y empresarial en el Mediterráneo.
Ameena Barekeh, es una libanesa de 23 años, que ha iniciado su propio negocio, durante los últimos dos años ha recibido educación especializada en materia económica y de idiomas y ha podido hacer realidad sus dos pasiones: el diseño gráfico y el skateboard, mediante el proyecto SK8 961 y además está desarrollando una app, para crear una comunidad de amantes del skateboarding en su región. Sataney Hina, es jordana y lleva siete años produciendo mermeladas caseras, que vende a pequeños clientes siempre de su entorno más cercano, pero ahora quiere ampliar su negocio y buscar mayoristas.
Como ellas muchas mujeres de esta región buscan mejorar su situación económica y ser autosuficientes abriendo pequeños negocios. Durante la Conferencia «Empoderamiento socioeconómico de las mujeres: proyectos para el progreso» celebrada en Barcelona, se ha lanzado un programa de formación y capacitación profesional dirigido a 1.800 jóvenes de 15 a 20 años que han terminado la educación secundaria para que puedan acceder al mercado laboral o emprender pequeños negocios. Hasta ahora se han realizado programas en Jordania, Túnez y Marruecos y a partir del año que viene se ampliará a Egipto y Líbano. El proyecto 'Skills for Success: Emplyability Skills for Woman', lo desarrolla Amideast.
También se ha acordado realizar un mapa o cartografía para recoger los proyectos que se realizan en esa zona y conocer a los actores, las iniciativas y las fuentes de financiación destinadas al empoderamiento de las mujeres. Se trata de crear sinergias, fomentar las propuestas de ONGs y promover acuerdos entre el norte y el sur del Mediterráneo.
Las primaveras árabes, han contado con mujeres activas, mayoritariamente jóvenes, que sufren el paro en mayor medida que los hombres, pero en muchos países no han conseguido ningún reconocimiento. Tan solo en Túnez, se ha aprobado una constitución que recoge derechos específicos de las mujeres. Este aspecto también ha sido recordado en la Conferencia de Barcelona.
La ministra de desarrollo social de Jordania, Reem Abu Hassan» ha recordado que la violencia y la discriminación son los mayores obstáculos con los que se encuentran las mujeres y se ha mostrado partidaria de crear una hoja de ruta para establecer los objetivos. En su país ya lo están haciendo, pero hay muchos obstáculos para realizarlo en otros. Abu Hassan, denuncia, que hay una mejora clara en la situación de la mujer, pero «vemos que en varios países se ha ido hacia atrás en estos derechos. Es inaceptable que haya obstáculos para potenciar el desarrollo de las mujeres, por eso hay que luchar contra la discriminación de género». Ha abogado por que se revisen las leyes para incorporar la igualdad entre hombres y mujeres en las legislacionesy se ha mostrado partidaria de la discriminación positiva para cambiar la mentalidad cultural basada en valores machistas.
En la conferencia también se ha hecho referencia a la grave situación en que viven las mujeres sirias y palestinas, especialmente cuando están en campos de refugiados. Por su parte la directora general de Igualdad de Oportunidades del gobierno español, Carmen Plaza, ha destacado que a pesar de que el 70% de los licenciados son mujeres, eso no se ve reflejado en el ámbito laboral, y considera que las más vulnerables son las mujeres rurales, emigrantes y discapacitadas. Plaza recuerda que aunque las empresas que más empleo crean son las PYMES, éstas no están obligadas a implantar plantes de igualdad para reducir la brecha salarial.
Todos coinciden en la importancia de implementar medidas que favorezcan la conciliación familiar para conseguir que muchas mujeres se incorporen al mercado laboral, en ambas riberas del Mediterráneo, pero especialmente en el sur, porque consideran que «si no se potencia esa faceta, es muy difícil que rompan con estereotipos machistas, que no entienden el trabajo de la mujer fuera del hogar».