«La última gran exploración la hacemos para sobrevivir sobre la Tierra»
Hablamos con el explorador británico Robert Swan
Por Anna Shen
San Francisco, Estados Unidos,(IPS)- Recién llegado de Londres, Robert Swan se dispone a cumplir la promesa que hace décadas le hizo al célebre investigador marino francés Jacques Cousteau.
Cousteau le pidió que, por ser el último gran entorno natural sobre la Tierra, preservara a la Antártida de probables perforaciones y actividades mineras que podrían comenzar en 2041, año en que el Protocolo del Tratado Antártico sobre Protección del Medio Ambiente será sometido a evaluación y a una posible enmienda. Si ese documento se altera, es posible que una de las partes más prístinas del mundo cambie para siempre.
Swan planea llamar la atención sobre este asunto mediante lo que llama su «última gran expedición». Ahora planea caminar una vez más hacia el Polo Sur, y hacerlo sobreviviendo únicamente con energías renovables.
El explorador británico no es un novato en este tipo de desafíos. En los años 80 fue la primera persona en llegar caminando al Polo Sur primero y al Norte después. Dedicó su vida a crear conciencia sobre el cambio climático, y ahora espera volver a hacerlo con su última expedición.
Su primera parada ha sido en la conferencia por el Día Estadounidense de la Energía Renovable en Colorado, donde habló ante líderes del sector como Ted Turner y T. Boone Pickens. Ahora va rumbo a la Organización de las Naciones Unidas (ONU), donde el 16 de este mes hablará en el TEDx Un Plaza.
¿Qué fue exactamente lo que le pidió Jacques Cousteau?
Robert Swan: Me pidió que preservara la Antártida. Su misión durante 50 años fue preservar un lugar, y luego usar energía renovable para salvarlo. Y salvarlo es pensar en de qué manera a las empresas no les valga la pena ir a la Antártida a explorarla.
Háblenos sobre su inminente expedición
RS: Yo ya caminé hacia ambos polos y vi todas estas cosas sobre el cambio climático antes de que el mundo empezara a darse cuenta de ello. La última gran expedición es para sobrevivir sobre la Tierra.
Tenemos que ver cómo vamos a usar la energía en nuestro planeta. Si no lo hacemos, no habrá mundo que explorar. Estamos preparando una expedición para dentro de dos años que es un desafío realmente grande, y sobreviviremos en la Antártida con energías renovables, algo que nadie ha hecho antes.
Estamos dispuestos a volver y a someter las energías renovables a la última prueba. No sobreviviremos sobre la Tierra a menos que empecemos a depender de las energías limpias. Las decisiones de hoy están amenazando el futuro de la vida sobre la Tierra.
Esta es una historia que se inició hace 25 años al ir hacia los polos para experimentar personalmente los problemas, caminando sobre capas heladas que se derretían, sentir que nuestros rostros se quemaban debido a un agujero en la capa de ozono. ¿Cuál fue nuestra respuesta a eso? Pudimos habernos unido a Greenpeace y volvernos activistas; ellos hacen un excelente trabajo. Pero, ¿qué podríamos hacer que fuera diferente?
Pudimos trabajar con la industria y las empresas. Pero decidimos inspirar a la gente también, especialmente a los jóvenes, con las redes sociales y nuestra página de Facebook.
¿Cómo se relaciona su misión de crear conciencia sobre las energías renovables con los países en desarrollo?
RS: Cuando caminé hacia los polos, hace 22 años, el asunto de la energía no era una prioridad para nadie. La gente no estaba comprometida con la energía.
Estoy trabajando en proyectos de energía renovable en India; si no logramos que India y China usen energía renovable limpia para al menos 1.000 millones de habitantes (cada uno), tendremos un problema. Hace 15 años que trato con esos países, que son mucho más importantes de convencer que a Estados Unidos. Hay más gente en Mumbai que en California, hay 30 millones de personas en una sola ciudad india.
¿Qué países son los líderes en la producción de tecnología de energías limpias?
RS: Estados Unidos es el más avanzado en esta área, y también el que tiene más dinero. Es brillante en tecnología. Si alguien tiene una buena idea allí, hay grandes posibilidades de que la concrete.
Steve Jobs empezó en un garaje en Berkeley. Si uno tiene una idea fantástica (en Estados Unidos) puede hacer que funcione, y obtener el apoyo financiero para desarrollar la tecnología. Esto se debe a que la gente está dispuesta a invertir; los bancos y la infraestructura brindan el apoyo para que esto ocurra.
Alguien en China o India puede tener una gran idea, pero luego no hay respaldo financiero para hacer que ocurra. (Estados Unidos) puede financiarla; es por eso que corre con ventaja, y estas grandes personas se dan cuenta de que hay dinero que hacer, y un mercado.
¿Qué está faltando en el debate internacional sobre energías renovables?
RS: La ciencia nos dice que deberíamos estar haciendo ciertas cosas, pero la gente no está respondiendo a ella porque no está escuchando. La gente está estancada. Hay muchas naciones que se están desarrollando y quieren lo que nosotros queremos y tenemos en Occidente. La comunidad internacional tiene que ser mucho más clara en las direcciones que toma. Estados Unidos puede ayudar a la comunidad internacional exhibiendo un mejor liderazgo.
Una nación como India produce entre una y 1,5 toneladas de carbono por persona, pero en Estados Unidos la cantidad llega a 22 toneladas. En India la gente dice: «¿Cómo podemos lograr cambios cuando ellos producen 22 y nosotros una? ¿Por qué no podemos hacer lo que estamos haciendo?». Estados Unidos tiene que mostrar su liderazgo, que está logrando cambios. De otro modo, el resto del mundo no se lo tomará en serio. Y Europa también tiene que mostrar liderazgo.