Para endurecer la normativa contra el tabaco en Europa, la Comisión Europea aporta una cifra determinante: el tabaco es la principal causa de mortalidad evitable en la UE y provoca 650.000 muertes prematuras.
Bruselas lanzó en septiembre de 2010 una consulta pública para modificar la directiva sobre tabaco, que data de 2001, y obtuvo 85.000 respuestas, la mayoría de particulares y con resultados dispares. Se pedían opiniones sobre las advertencias sanitarias gráficas en los paquetes, un envasado más sobrio y la regulación de las sustancias perjudiciales o adictivas de los cigarrillos
No hay grandes divergencias con la industria tabaquera sobre la obligatoriedad de informar sobre los ingredientes en un formato común, aunque quieren que se mantenga la posibilidad de diferenciar el producto. Tampoco sobre las ilustraciones de las cajetillas con imágenes que inciten a dejar el hábito de fumar.
El asunto más polémico es que Bruselas querría que las cajetillas de tabaco fueran genéricas, es decir, sin marcas ni logotipos y solo con advertencias sanitarias y fotografías de gran impacto sobre los efectos negativos del tabaco.
Una iniciativa similar ya ha sido aprobada por el Parlamento australiano y ha conducido a un fuerte enfrentamiento con la industria que ha llegado a los tribunales. En Europa, en principio, parece que las compañías tabaqueras no se oponen frontalmente a la medida, pero insisten en que el envasado con recomendaciones contra el tabaco no es efectivo para dejar de fumar y que parte del supuesto erróneo de que el consumidor no es consciente de los peligros que entraña el tabaco.
La nueva legislación tiene otros puntos controvertidos porque Bruselas plantea también regular o prohibir la venta en máquinas expendedoras o prohibir la publicidad de tabaco en los puntos de venta.
El Club de Fumadores por la Tolerancia critica la consulta pública de la UE: «Estaba colgada en una web difícil de encontrar, dentro de la inmensa red de webs oficiales de la UE; toda la consulta estaba expresada en inglés y su trámite era arduo y costoso». Dice además que Bruselas presenta las opiniones a favor y en contra de la reforma, «pero nos ocultan que en contra de la reforma hay más de 70.000 respuestas, mientras que a favor apenas se superan las 10.000».
La revisión de la directiva europea debería estar lista en el primer trimestre de 2012 con una regulación más estricta de todos los aspectos de la venta y consumo de tabaco, tanto sanitarios, como económicos, sociales y medioambientales.