El nuevo centro, denominado EC3, estará en la sede de Europol de Holanda y, hasta el momento, no se ha facilitado ni su dotación presupuestaria ni de personal. Sin embargo, desde la Comisión Europea hacen hincapié en el impulso que dará a la defensa de una Internet libre, abierta y segura. «Los ciberdelincuentes son inteligentes y rápidos en la utilización de nuevas tecnologías con fines delictivos; el EC3 nos ayudará a ser aún más inteligentes y rápidos que ellos para poder contribuir a prevenir y combatir sus delitos», ha manifestado la comisaria europea de Interior, Cecilia Malmström.
La idea es que la ciberdelincuencia no conoce fronteras y, por eso, los trabajos de las policías nacionales resultan muchas veces ineficaces. Como ejemplo, se citan los fraudes en línea o los abusos a menores a través de Internet que implican a cientos de víctimas simultáneamente y sospechosos en diversas partes del mundo.
«El Centro Europeo de Ciberdelincuencia está diseñado para aportar sus conocimientos como centro de fusión de la información y de apoyo operativo forense y de investigación, pero también, por su capacidad para movilizar todos los recursos pertinentes en los Estados miembros de la UE, para aliviar y reducir la amenaza que representan los ciberdelincuentes con independencia del lugar desde el que actúen», ha afirmado Troels Oerting, Director del Centro.
La actividad del EC3 se centrará en las actividades ilegales en línea de las bandas de delincuencia organizada, especialmente en los ataques dirigidos contra las operaciones bancarias y otras actividades financieras en línea, la explotación sexual infantil en línea y los delitos que afecten a las infraestructuras críticas y a los sistemas de información en la UE.
El nuevo Centro Europeo apoyará el trabajo de jueces y fiscales, hará una labor de documentación sobre delincuencia, emitirá alertas tempranas y prestará apoyo operativo a los países de la UE. Un reciente Eurobarómetro desveló que los europeos tienen gran preocupación por la seguridad informática y que un 12% ya ha sido víctima de un fraude en línea.