Las eurodiputadas quieren que la paridad de la que tanto se habla en las decisiones de las Instituciones Europeas se vea reflejada en sus altos cargos.
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, está a punto de elegir a su nuevo Ejecutivo en el que no parece que vaya a haber más de tres o cuatro mujeres. En el Gabinete actual hay ocho comisarias.
La única española entre las manifestantes ha sido la portavoz del Bloque Nacionalista Galego, Ana Miranda, quien ha recordado que de los 736 escaños de la Eurocámara sólo 257 están ocupados por mujeres y que de los 27 Gobiernos europeos solamente 3 han dado nombres de mujeres para formar la nueva Comisión.
La eurodiputada alemana verde, Rebeca Harms, reclama a los gobiernos que presenten «dos o tres nombres» por país incluyendo hombres y mujeres, para que el presidente de la Comisión tenga donde elegir.
Por su parte la francesa Pervenche Berès cree que Barroso debería «rechazar» las propuestas si no tiene suficientes mujeres en las listas.
El éxito de las demandas de las eurodiputadas depende de que los hombres de sus propios partidos las secunden y que las mujeres del Partido Popular Europeo (PPE) «entiendan» que necesitan su apoyo.