Los países que más relaciones económicas tienen con Rusia han bloqueado en el Consejo las sanciones económicas. Se reservan, dicen, hasta conocer la reacción rusa y comprobar si aumenta su presencia en Ucrania. Las medidas de sanción contra un país se deben tomar de forma unánime entre los 28 y varios países tienen fuertes relaciones comerciales, sobre todo de importación de gas y petróleo, con Rusia así que se resisten a hacer nada que pueda interrumpir el suministro.

El presidente francés, François Hollande, no ha querido dar nombres de los sancionados. En total son 33 las personas sancionadas. Por su parte la canciller Angela Merkel, dijo que se preparan medidas comerciales y económicas contra Mosú si se sigue expandiendo hacia el este y sur de Ucrania (norte de Georgia, Moldavia y la conflictiva región de Transnistria).

La cumbre UE-Rusia que estaba prevista para junio ha quedado suspendida. Asimismo, el Consejo Europeo y los Estados miembros apoyan la suspensión de negociaciones sobre la adhesión de Rusia a la OCDE y a la AIE y la próxima sesión de los países del G7 en La Haya.

Barack Obama, que inicia una visita a Europa este domingo, ha convocado una reunión del G-7 la semana próxima. El grupo está formado por Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido, todos los miembros del G8 menos Rusia. En la reunión se tratará la situación de Ucrania y las medidas que el grupo podría adoptar para apoyar al país según evolucionen los acontecimientos.

Por su parte los Estados miembros de la UE no celebrarán de momento sus cumbres bilaterales periódicas con Rusia.

Este viernes se han firmado las disposiciones políticas del Acuerdo de Asociación entre la UE y Ucrania. El Consejo, dice en un comunicado, que están resueltos a firmar las restantes partes del acuerdo y las disposiciones para la creación de una zona de libre comercio de alcance amplio y profundo.

La primera reunión del diálogo político que establece el Acuerdo tendrá lugar en abril. El Consejo Europeo insta a que se adopte «con celeridad» la propuesta de suprimir temporalmente los derechos de aduana –las denominadas medidas comerciales autónomas– sobre las exportaciones ucranianas a la Unión Europea.

Restaurar la estabilidad macroeconómica en Ucrania es una prioridad para la Unión que le dice que «tiene que emprender rápidamente un ambicioso programa de reformas estructurales, que comprenda medidas para combatir la corrupción y aumentar la transparencia de todas las operaciones presupuestarias».

Señala, asimismo, que es esencial llegar a un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para que Ucrania reciba una ayuda macrofinanciera.

En cuanto al conflicto con Rusia «la Unión Europea valora positivamente la moderación que ha demostrado Ucrania hasta la fecha en respuesta a la situación» y anima al Gobierno a garantizar que las elecciones presidenciales del 25 de mayo serán libres y justas.

La Unión Europea está resuelta a apoyar la soberanía e integridad territorial de Ucrania. «El Consejo Europeo no reconoce el referéndum ilegal de Crimea que constituye una clara vulneración de la Constitución ucraniana», dice el comunicado. Añade que condena firmemente la anexión ilegal de Crimea y Sebastopol a la Federación de Rusia, y no la reconoce. El Consejo Europeo pide a la Comisión que evalúe las consecuencias jurídicas de la anexión y proponga medidas económicas, comerciales y financieras restrictivas para que se apliquen con prontitud.

El presidente de la Comisión José Manuel Barroso, ha dicho que están listos para firmar acuerdos similares al de Ucrania antes de junio con Moldavia y Georgia.