Un total de 1.000 millones irán a Irlanda, y los 2.000 restantes a Portugal. Los bonos que se han subastado pagan un cupón del 2,5 % y ofrecen una rentabilidad del 2,621 % que deberán pagar los dos países. La demanda ha sido fuerte y ha rondado los 6.000 millones de euros.
Alemania y Austria son los que más bonos se han quedado un 31 %, Reino Unido el 25 %, Benelux 12 %, Suiza 10 %, Francia 9 % y los países escandinavos un 7 %. Entre el resto de países europeos se ha colocado un 1 % y un 5 % ha ido fuera de Europa. Durante este año la UE ha captado un total de 15.800 millones de euros.