Dexia S.A. es el resultado de la fusión que en 1996 se hizo de dos bancos, el Crédit Local de Francia y el Crédit Municipal belga. Ahora tiene tres filiales, el Dexia Credit Local en Francia, el DBB en Bélgica y el Dexia Bil en Luxemburgo.
El banco hace tiempo que tiene problemas, tantos que en 2008 tuvo que ser recapitalizado, se suponía que a cambio de un plan de reestructuración que tenía que durar hasta 2014. Pero no ha levantado cabeza y ahora tiene que ser rescatado de nuevo.
Los Gobiernos de Bélgica, Francia y Luxemburgo acordaron crear un «banco malo» para aislar los activos tóxicos causantes del descalabro. Una nueva entidad a la que Bélgica dará 54 000 millones de euros, Francia 32 850 millones y Luxemburgo 3 150 millones de euros.
Bélgica tiene 6 meses para presentar a Europa un plan de reestructuración del banco que garantice su vuelta a la viabilidad.