Un reportaje de Press TV, la emisora oficial del régimen, provocó, al parecer, el equívoco. Se trataba de un reportaje, en el que la mujer aparecía con su hijo en casa. Sin embargo, eran imágenes grabadas en una recreación de los hechos por los que se la juzga el pasado 6 de diciembre.
Sakineh fue condenada a muerte en 2006 por mantener relaciones con dos hombres tras la muerte de su esposo. Después fue acusada también de cómplice en el asesinato de su marido. Su caso ha provocado la movilización de organizaciones de derechos humanos en todo el mundo.