Las mujeres representan el 60 por ciento de los ciudadanos de la UE con titulación universitaria, un porcentaje que no encuentra parecido ni en el mercado profesional ni en los puestos de responsabilidad empresarial o política. A juicio de la ministra española de igualdad, Bibiana Aído, eso representa un despilfarro de capital humano.
También lo es para la UE. La comisaria de Justicia, derechos fundamentales y Ciudadanía, Viviane Reding opina que si «Europa desea seriamente salir de la crisis y convertirse en una economía competitiva mediante un crecimiento inteligente e inclusivo, tenemos que aprovechar mejor el talento y las cualificaciones de las mujeres»
En el informe La presencia de más mujeres en puestos superiores es clave para el crecimiento económico de la UE, que será presentado este viernes en Valencia, se pone de manifiesto que las mujeres siguen estando infrarrepresentadas en la toma de decisiones económicas. En el mundo empresarial, los hombres ocupan casi el 89% de los puestos en los consejos de administración de las principales empresas europeas que cotizan en bolsa. La diferencia es mayor cuanto más importante es el puesto y solo en un 3% de estas empresas una mujer está al frente. El único país más equilibrado con un 42% de mujeres en los consejos es Noruega, donde hay establecida una cuota legal.
En la política, el Parlamento Europeo es el más igualitario con un 35% de mujeres y un 65% de hombres. En los diferentes Parlamentos nacionales ha aumentado la relación, en 1997 había un 16% y ha llegado a un 24% en 2009. Falta mucho para el 30%, la llamada masa crítica necesaria para que la influencia de las mujeres en política sea significativa.
En un Eurobarómetro reciente, más de la mitad de los europeos (55%), opina que la proporción entre hombres y mujeres en los Parlamentos debe abordarse con urgencia.
La crisis financiera ha hecho que el papel de la mujer en las empresas sea cada vez más importante.
Diferentes estudios demuestran que existe una correlación positiva entre el número de mujeres en puestos superiores y el rendimiento de las empresas. Un estudio realizado en Finlandia dice que las que mantienen un equilibrio entre hombres y mujeres son por término medio un 10% más rentables que las que tienen una directiva totalmente masculina.
Según un estudio, hecho durante la presidencia sueca de la UE el semestre pasado, eliminar las diferencias de género en materia de empleo podría generar un incremento en el PIB de la UE de entre el 15 y el 45%.
El pasado 5 de marzo, la Comisión Europea publicó un Carta de la Mujer que comenzará a aplicar a finales de este año. Una de las prioridades de esta estrategia de la Comisión es promover la igualdad en la toma de decisiones.