Tresaños de obras después, el estadio olímpico de Kiev está preparado para acoger a las selecciones de fútbol de la UEFA Euro 2012. Cuenta con 68.000 localidades sentadas y dos pantallas gigantes, además de todo tipo de servicios y un centro de prensa para 1.500 profesionales. El 11 de noviembre, un amistoso entre Ucrania y Alemania lo pondrá a prueba.
El gobierno ucraniano juega la baza de la identidad nacional para resaltar el acontecimiento, en un momento de horas bajas. El primer ministro, Viktor Yanukovich, fue abucheado por parte del público en el acto de inauguración mientras decía: «Hoy todo el país lo está celebrando. El nuevo estadio es un regalo a toda nuestra gente, especialmente los jóvenes y niños entre los que estarán los campeones del futuro. La exitosa remodelación del NSK Olimpiskiy ha sido el proyecto más importante para la imagen de Ucrania».
La ceremonia se vio también interrumpida por representantes del movimiento feminista Femen, que irrumpieron en el campo con los senos desnudos para reclamar una Eurocopa 2012 sin prostitución. Después, durante el espectáculo pirotécnico, se registró un pequeño incendio en el techo del estadio, que pudo ser sofocado sin consecuencias.
A pesar de estos incidentes, queda el sonido del Waka Waka que interpretó Shakira como símbolo del fair play que se espera en la Eurocopa, en todos los sentidos. Hace solo unos días el presidente de la UEFA, Michel Platini, visitó Kiev y sentenció que «no hay grandes problemas en los preparativos, pero hay muchos pequeños problemas que aún tienen que ser resueltos». Las principales pegas están en la red de transportes y en las plazas hoteleras de la ciudad.
Lvov, Kharkov y Donetsk son las otras ciudades ucranianas donde se jugarán partidos de la Eurocopa. El resto se celebrarán en Polonia. La final, en el Olimpiyskiy de Kiev, el 1 de julio de 2012.