Según los datos recogidos por la revista Variety, la taquilla se resiente en los países de la eurozona donde más golpea la crisis. Italia es el país que más acusa el bajón. Allí los ingresos se han reducido un 12% en lo que va de año, tras una caída del 10% en 2011.
En España, el descenso se ha acusado más este año. Hasta junio se ha recaudado un 12% menos, aunque la caída del año pasado fue mucho más leve, del 2,7%. El blog Rentrak, especializado en el tema, calcula que la recaudación obtenida en las salas de cine españolas el último fin de semana ha sido el peor desde que se hace mediciones de este tipo. Las cinco películas más vistas, que suelen recaudar el 70% del total, han conseguido sólo 2,1 millones de euros.
Portugal está viviendo una situación parecida a la española y, tras un 2011 con ligeras bajas en torno al 3% de ingresos, entre enero y mayo de este año ya contabiliza pérdidas del 11%. Grecia e Irlanda, que sufren también los efectos del rescate europeo, llevan dos años con descensos en la recaudación de un 7%.
El productor Angelo Barbagallo explica en Variety que el plan de los adolescentes europeos para un fin de semana solía ser cine y pizza. Si hay que recortar gastos, se quedan solo con la pizza. El desempleo juvenil alcanza cifras escandalosas en los países del sur de Europa, con España a la cabeza, donde el 51% de los jóvenes menores de 25 años no tiene trabajo. Esa circunstancia se deja notar en la recaudación de títulos pensados para un público joven.
Los distribuidores cinematográficos en España confían en que algunos de los lanzamientos previstos para este verano como The Amazing Spiderman o Ice Age. Continental Drift reaviven el mercado.
La industria se salva porque en los mercados más importantes de Europa, Alemania, Reino Unido y Francia, no ven repercutir en las entradas cinematográficas la recesión de la eurozona.