De este modo, el informe pide una «corrección duradera de los desequilibrios presupuestarios» cuya aplicación sea «creíble» para emprender reformas estructurales que aumenten el crecimiento y el empleo. También considera que España debería adoptar medidas adicionales en impuestos medioambientales, con el objetivo, además de crear «más trabajos verdes», ha señalado el Comisario de Empleo Lászlo Andor.

Bruselas insta al Gobierno de Mariano Rajoy a que emprenda mayores reformas en el mercado de trabajo y, en especial, en la lucha contra el desempleo juvenil, que actualmente se encuentra en más del 50%. Las recomendaciones también consideran que España debe mejorar el sistema educativo, en especial, reducir la tasa de abandono escolar, que ahora es del 15%.

Así, los técnicos de la Comisión consideran «crítica» la situación del mercado de trabajo. Y estiman que el reajuste de la economía hacia «ámbitos distintos de la demanda interna y el sector de la construcción en un contexto de rigideces del mercado y de desajuste de la capacitación profesional, entre otras cosas, ha contribuido al aumento del índice de desempleo al 27 % a principios de 2013». Y alerta de que ese número tan alto índice de parados sin cualificación, un 35%, es, en parte, una consecuencia del gran paro juvenil.

Por ello, el informe considera que a causa, fundamentalmente, de la situación del mercado de trabajo, y también de «la limitada eficacia de la protección social para reducir la pobreza, España se halla por debajo de la media de la UE en lo que se refiere a los principales indicadores de medición de la pobreza y la exclusión social»; y que los niños son los más expuestos a esas situaciones. Además, según cálculos del Ejecutivo comunitario entre 1.400.000 y 1.500.000 personas están en riesgo de exclusión social.

Sin embargo, y pese a las recomendaciones a España, el Presidente del Ejecutivo Comunitario, José Manuel Barroso, se ha congratulado porque prácticamente todos los Estados miembros están empezando a crecer, a excepción de Croacia y Chipre, que son las únicas cuyas economías seguirán en recesión. Según Barroso, el reto principal de la UE actualmente es político, porque los líderes europeos deben mantener la senda de las reformas, aunque sean «impopulares». Asimismo, el Comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, ha recordado que tan sólo 11 Estados miembros superan la barrera del 3% de déficit.