En enero, los 27 se dieron un plazo de seis meses para ir disminuyendo sus importaciones de crudo de ese país. En el caso de España, las importaciones de crudo iraní representan el 13 por ciento de del total, por lo que ha tenido que recurrir a otros países para abastecerse, entre ellos Arabia Saudí, Rusia e Irak. Otros dos estados miembros que sentirán las consecuencias del embargo son Grecia e italia. Las sanciones occidentales has supuesto una bajada de las exportaciones iraníes de un 40 por ciento.
Irán ha amenazado a Corea del Sur de dejar de comprar productos surcoreanos si Seúl secunda el embargo de la UE. Los países europeos controlan el 90 por ciento de los seguros marítimos de los cargueros en el mundo, que también se han visto afectados por el embargo, lo que obliga a otros países a no poder trasladar el crudo. Hasta hace poco la UE compraba el 80 por ciento del petróleo que produce Irán, que extraía más de 2 millones de barriles diarios. Irán ha convocado una sesión extraordinaria de la OPEP para establecer nuevos precios y cuotas ante la caída de precios en el mercado internacional. La producción de los países exportadores de petróleo ha caído en junio, debido a las sanciones occidentales y ha llevado la oferta iraní a su nivel más bajo en 20 años, lo que le sitúa por detrás de Irak. De momento esa bajada se ha compensado con la producción extra de Arabia, Irak y Libia.