La UE se ha mostrado contraria a las expulsiones de grupos de sirios que han llegado al Líbano buscando un refugio. Ese país está devolviendo a centenares de refugiados a su país, para, según las autoridades libanesas, mantenerse neutral en el conflicto. La Alta Representante de Asuntos Exteriores le recuerda que como firmante de la convención contra la Tortura, debe asegurar la protección de los refugiados y en estos momentos, dice un comunicado de Bruselas, «en Siria la vida de las personas está en peligro en todo el país».
El problema de mayor tensión para la UE, en estos momentos está en Bielorrusia. Bruselas ha amenazado a Minsk con tomar «medidas apropiadas» por la expulsión del embajador sueco. Las relaciones entre los dos países han subido de tono después de que Suecia haya respondido con la expulsión de dos diplomáticos bielorrusos. En su cuenta de twitter, el ministro sueco de exteriores calificó la expulsión de su embajador de «vergonzosa, lo que demuestra la naturaleza del régimen». En los últimos meses, la UE ha aprobado sanciones contra el regimen de Lukashenko considerado el último dictador de Europa. Según el gobierno bielorruso, el embajador sueco se había reunido con miembros de la oposición, pero las relaciones entre ambos países se habían deteriorado después de que hace unas semanas una avioneta, contratada por una empresa sueca, lanzara osos de peluche con textos relacionados con la defensa de los derechos humanos. Un hecho que hubiera pasado desapercibido si un twitero no hubiera fotografiado los juguetes y los hubiera colgado en internet. La policía lo detuvo hace unos días.
La misión de observadores de la UE a las elecciones legislativas del 10 de mayo en Argelia ha presentado su informe, en el que ha destacado que los comicios estuvieron marcados por «debilidades» e «insuficiencias» y los resultados se han visto marcados, en parte, por un «rechazo a la oferta política» por parte de los ciudadanos. El vencedor fue el gubernamental Frente de Liberación Nacional, que consiguió 208 de los 462 escaños del parlamento. La UE ha publicado un informe de 60 páginas, en el que destaca que a pesar de que se presentaron 44 partidos políticos, hay que destacar el rechazo de los ciudadanos a la oferta política, ya que hubo casi 2 millones de votos en blanco o nulos (el 18 por ciento) de los sufragios. La UE envió 150 observadores a esas elecciones, las primeras que se celebran en el país norteafricano de 37 millones de habitantes, tras el inicio de la «Primavera árabe» con manifestaciones masivas, rápidamente sofocadas por la policía, en las que se perdían reformas políticas.
La UE también ha celebrado el acuerdo entre Sudán y Sudán del Sur sobre la explotación del petróleo en la zona fronteriza, y cree que va a contribuir a la viabilidad económica de ambos países y al bienestar de la población. La jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, recuerda que todavía deben tratarse otras cuestiones cruciales, entre las que destaca la necesidad de concretar las fronteras de la región de Abyei, una de las más ricas en petróleo. También se ha felicitado porque el acuerdo va a permitir la llegada de ayuda humanitaria para la población en regiones como Kordofán del Sur y Nilo Azul.
Ashton también se ha lamentado de las ejecuciones de dos reos condenados a muerte en Japón, y ha pedido al gobierno nipón que abandone la pena capital. En un comunicado, Bruselas recuerda que para Europa la pena de muerte es «cruel» e «inhumana» y espera que Japón «se una a la comunidad de países que han abolido la pena de muerte». Después de dos años de «parón», Japón ha ejecutado a cinco reos en los últimos 4 meses.