Pide priorizar el empleo juvenil
IBM ha anunciado que va a suprimir 700 puestos de trabajo en sus 19 centros en Francia, donde trabajan 9.700 personas. A finales de abril anunció el despido de 1.226 antes de 2014. Mala noticia para el presidente francés, François Hollande, que hoy ha pedido una «rápida movilización de fondos europeos para destinarlos a promover el empleo juvenil. La UE tiene «que actuar con urgencia», ha dicho el presidente galo.
La Comisión Europea se comprometió a destinar, en los próximos cinco años, 6.000 millones de euros para el empleo juvenil con la previsión de que un joven que termine sus estudios universitarios pueda encontrar empleo en un plazo mínimo de cuatro meses. Para Hollande, la idea es buena, pero el reto es como llevarlo a la práctica. Aunque él tampoco ha dado más detalles.
París acoge hoy una reunión para tratar la situación del desempleo en la UE, organizada por el multimillonario germano-estadounidense, Nicolás Berggruen. Entre los dirigentes que participan, se encuentra el del gobierno español, Mariano Rajoy, uno de los países europeos con un mayor índice de paro juvenil, que supera el 57%. Hollande ha propuesto un gobierno económico europeo que tenga la capacidad presupuestaria, con fondos específicos para la zona euro, que se podrían obtener gravando las transacciones financieras. El presidente francés ha dicho «mi generación de la posguerra tuvo una respuesta de Europa ¿Podemos dejar a la generación actual una ausencia de perspectivas?.
Durante su discurso Hollande ha recordado que el 3 de julio habrá una reunión de ministros de empleo en Berlín, en el que participará él y la canciller alemana, Angela Merkel». «En Berlín, ha dicho Hollande, haremos una ofensiva para el empleo y debemos ser capaces de dar a los jóvenes una perspectiva». En relación a la situación económica actual, el mandatario francés ha señalado avances en el último año «ha habido progresos indiscutiblemente: la zona euro ha recuperado estabilida y las actuaciones del BCE han vuelto la calma a los mercados». Según ha dicho «eso ha permitido a la CE corregir algunos objetivos».
Algunos analistas señalan que el proyecto franco-alemán es el «New Deal» para Europa». Aunque los detalles no se han definido públicamente, se prevé conceder créditos a grandes empresas para contratar y formar jóvenes y que el BCE preste unos 60.00 millones de euros. Una de las ideas que se baraja es crear una especie de Erasmus para los trabajadores, que les permita una mayor movilidad por todo el territorio de la UE.
Hollande ha defendido la intervención del Banco Europeo de Inversiones (BEI) para dar estas garantías y líneas de crédito específicas» que sirvan para la creación de empleo juvenil. El ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble, ha defendido la necesidad de reformas estructurales para que las economías europeas sean competitivas. «Con un crecimiento sostenible, lograremos crear empleo para los jóvenes», ha dicho. Schäuble, uno de los más férreos defensores de la austeridad en Europa, ya en la última reunión de ministros de finanzas del G-7 destacó la importancia de «acelerar la lucha contra el paro juvenil», al que calificó como «el mayor problema» del continente.
Y es que Alemania, a unos meses de las elecciones generales, comienza a preocuparse por su imagen en el exterior. La mayoría de europeos, la responsabilizan de las medidas de austeridad que han tenido unas consecuencias desastrosas en el aumento del paro, y han frenado el crecimiento económico. En los países más afetados, los mediterráneos, es habitual ver pancartas con la imagen de Merkel asociada a Hitler y al nazismo. Una «mala prensa» en uno de los pocos países que necesita mano de obra joven, el año pasado 33.000 plazas no encontraron un candidato idóneo. Incluso los resultados obtenidos en el festival de Eurovisión, son para los germanos un síntoma de su mala imagen, porque 34 de los 39 países que emitieron votos, no apostaron ni un solo punto por Alemania.
Las cifras de paro juvenil en la UE son preocupantes. Seis millones de jóvenes están en paro y catorce millones ni trabajan ni estudian. En Grecia el 64% de los jóvenes está en paro, en España llega al 57%, en Italia afecta a dos de cada cinco menores de 25 años y en Francia y Portugal ha crecido de forma alarmante.