En sus primeras declaraciones en Atenas ante miles de seguidores, Alexis Tsipras 40 años, ingeniero, ha dicho que el mandato que ha recibido, es sin duda, «salir del círculo vicioso de la austeridad». Ha asegurado que el pueblo griego «ha dejado a la troika atrás» y ha agregado «Nuestra victoria es útil para el pueblo europeo que lucha contra la austeridad».
Precisamente ese mensaje a los europeos es el que la troika quería evitar. Los líderes de la eurozona han repetido este domingo que Grecia debe respetar los términos de los acuerdos que firmó para recibir el rescate de 240 000 millones de euros.
Por su parte Tsipras ha dicho tras conocer los resultados de los comicios que cooperará con los líderes de la zona euro para encontrar «una solución justa y beneficiosa para todos», pero ha dejado claro que la prioridad «será hacer frente a las heridas dejadas por la crisis (...) Nuestra principal prioridad es que nuestro país y nuestra gente recupere la dignidad perdida».
De todo eso se va a discutir este lunes en la reunión del eurogrupo (ministros de Economía y Finanzas de la zona euro) que hay convocada. Especialmente de los 7 mil millones de euros del rescate que Grecia debería recibir en breve y que algunos ya han planteado que solamente si adopta nuevas medidas de ajuste.
En estos momentos Grecia tiene suficiente dinero para cubrir sus necesidades en los próximos dos meses, pero este verano deberá devolver unos diez mil millones de euros y los altísimos intereses que tendría que pagar le impiden conseguir dinero en el mercado.
La presidenta del grupo socialista francés en el Parlamento Europeo, Pervenche Berès, ha dicho en un comunicado que el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, debe escuchar el mensaje que le llega desde Grecia y convencer a los jefes de Estado y de Gobierno para acelerar un cambio en la política económica.