España será el cuarto país de la eurozona que menos crecerá en 2014, por delante irán Chipre con una caída del -3,9 %, Eslovenia que se contrae un -1 % y Holanda un -0,2%. En el resto de la eurozona Alemania crecerá un 1,7 %, Francia un 0,9 % o Italia un 0,7 %. En cuanto a los países que han sido rescatados, Irlanda es el que más crece con un 1,7 %, le siguen Portugal con un 0,8 % y Grecia con un 0,6 %.
En España el déficit público será este año del 6,8 %, por encima de las previsiones. La CE había calculado un déficit para España del 6,5 % en 2013, ahora lo revisa al alza, mientras que lo rebaja del 7 al 5,9 % en 2014. En 2015 será del 6,6 % del PIB y tiene hasta 2016 para cumplir las exigencias del 3 %.
Hasta 2014 no prevé la CE un raquítico crecimiento del 0,5 % «respaldada por la mejora en el resto de la UE y los progresos de las políticas en el ámbito nacional», una rebaja respecto a las previsiones del pasado mayo cuando situaba el crecimiento en el 0,9 %.
En cuanto al paro «insoportablemente» elevado en palabras del vicepresidente de la CE y encargado de la política económica, Olli Rehn, parece que se ha estabilizado. «Se estima que el desempleo caiga gradualmente a lo largo del escenario previsto, mientras la fuerza laboral sigue reduciéndose y la destrucción de empleo alcanza un punto de inflexión a lo largo de 2014» dice la Comisión que baja las previsiones de paro para este año hasta el 26,6 % y hasta el 26,4 % en 2014.
La conclusión es que en España se inicia en la segunda mitad de este año una «recuperación moderada» gracias a la fuerza de las exportaciones aunque avisa de que «las todavía grandes necesidades de ajuste limitarán la fuerza de la recuperación». La Comisión resalta que el crédito sigue contrayéndose y que las condiciones de financiación para los hogares y las empresas siguen siendo difíciles, especialmente para los pequeños prestatarios.
En cuanto al conjunto de la eurozona Bruselas prevé que la economía retrocederá este año un 0,4 % y estará en el 0 % en el conjunto de los veintiocho. Para 2014 prevé un crecimiento del 1,1 % (1,4 % en la UE) y un 1,7 % en 2015 ( 1,9 % en la UE).
En cuanto al paro que ha comenzado a estabilizarse en los últimos meses se prevé que sea del 10,7 % en la UE y del 11,8 % en la zona euro en 2015, con grandes diferencias entre países.
Olli Rehn ve signos «cada vez más importantes de que la economía europea ha alcanzado un punto de inflexión» y que la consolidación fiscal y las reformas estructurales han sido las que «han creado las bases de esa recuperación». Aunque cree que «es muy pronto para cantar victoria ya que el empleo continúa a un nivel inaceptable».
En cuanto al déficit público de la eurozona será este año del 3,1 %, del 2,5 % en 2014 y del 2,4 % en 2015.