Los 15 días de bombardeos a los que Israel ha sometido ya al norte de Gaza han obligado a miles de civiles a huir de sus hogares y a buscar refugio en las escuelas gestionadas por la Agencia de la Organización de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA). Entre los más afectados los niños y niñas, que viven con miedo y en peligro constante, según Sami Awaida, psiquiatra infantil del Programa de Salud Mental de Gaza, una organización humanitaria que se especializa en traumatismos derivados de la guerra y problemas de salud mental.
«Los niños de Gaza sufren de ansiedad, miedo e inseguridad como consecuencia de esta situación de guerra. El reto al que nos enfrentamos ahora como profesionales de la salud mental es el 'trastorno por estrés postraumático'», nos indica Awaida.
Este tipo de trastorno se caracteriza por síntomas específicos que surgen tras la exposición a un hecho estresante, sumamente traumático, que involucra un daño físico o una grave amenaza para la persona en cuestión.
«Los niños de Gaza ya padecieron dos recientes experiencias violentas y traumáticas en 2009 y 2012», señala Awaida, en referencia a las dos últimas ofensivas de Israel que dejaron más de 1.150 muertos y miles de heridos en el territorio palestino.
«Ahora este trauma vuelve a generar el dolor y el shock anteriores y también conduce a un estado mental de temor e inseguridad permanente», asegura.
Desde el 7 de este mes, Israel somete a la Franja de Gaza a una fuerte ofensiva militar y ataca a las facciones palestinas en una nueva ronda de violencia en Medio Oriente.
El Ministerio de Salud palestino ha informado hasta el momento de una cifra de 230 muertos, en su mayoría familias enteras que murieron por el bombardeo de sus casas, mientras el número de heridos se eleva a 2.500. Muchas de las víctimas son niños y niñas.
Pero las cifras de fuentes situadas en Gaza establecen que las víctimas mortales sobrepasan ya el medio millar.
En tanto, los centros sanitarios padecen de una grave escasez de suministros, equipos y personal para hacer frente a la emergencia.
Ashraf Al Qedra, portavoz del Ministerio de Salud de Gaza, apela a la comunidad internacional para que «apoye a los hospitales... con suministros médicos de urgencia, ya que Israel continúa sus ataques militares que han dejado más de 800 viviendas totalmente destruidas y a 800 familias desamparadas».
Las fuerzas militares israelíes han sido acusadas de llevar a cabo una política de destrucción de casas palestinas y de masacre de civiles desde que Israel comenzó su ofensiva actual.
Adnan Abu Hasna, asesor de medios de comunicación y portavoz de la UNRWA, dice que la agencia «ha reclamado oficialmente que Israel respete el derecho internacional humanitario y la neutralidad de los civiles en la operación militar».
La «UNRWA hace hincapié en la necesidad de cumplir con el llamamiento del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, a cesar de inmediato la violencia, debido al creciente número de niños y mujeres muertos por los ataques y bombardeos de Israel en Gaza», destaca.
Assam Yunis, director del Centro Al Mezan para los Derechos Humanos en Gaza, habló con nosotros sobre las violaciones a los derechos humanos y la necesidad urgente de justicia. «La situación actual es catastrófica en todos los aspectos», afirma.
Las violaciones de «los derechos humanos por parte de Israel son increíbles e incluyen ataques contra equipos médicos y periodistas, además de niños y mujeres», sostuvo.
«Son violaciones claras del derecho internacional, así como crímenes de guerra. Israel debe ser considerado legalmente responsable a nivel internacional», manifiesta.
El analista político Ibrahim Ibrash opina que «Israel no logrará nunca acabar con el movimiento (islamista) Hamás ni con la resistencia palestina de Gaza. Por otra parte, los combatientes palestinos no lograrán nunca destruir y derrotar a Israel».
Las consecuencias para los palestinos en el plano interno después de que termine el conflicto militar serán esenciales, incluida la «división entre la población y la Autoridad Nacional Palestina. Mucha gente quedará indignada con el gobierno, y esto, por supuesto, dejará a Gaza en un estado deplorable», comenta.
El conflicto se produce en el contexto del bloqueo impuesto por Israel a la Franja de Gaza, el desempleo generalizado, la pobreza extrema, los cortes de electricidad, el cierre de fronteras y cruces desde 2006, infraestructura destruida y una economía estancada.
Todo esto se combina con la falta de avances políticos en la mediación entre israelíes y palestinos.
Nadie puede negar que la población civil gazatí es la verdadera víctima de este conflicto.