El campeonato de la Copa del Mundo de fútbol ha estado caracterizado, tradicionalmente, por el dominio de selecciones europeas y sudamericanas. Entre ambos continentes se reparten todos los trofeos desde que en 1930 se fundara la competición. En la vigésima edición, que comienza este jueves, vuelven a ser ellos quienes mejor se posicionan para conquistar el torneo. Pero no estarán solos. Desde América del Norte, África y Asia amenazan su hegemonía.

España y un variado elenco de candidatos representan a Europa

Las selecciones del Viejo Continente cruzan el charco con ilusión, lideradas por España, que defiende el trono con la columna vertebral de 2010 más una camada de futbolistas que debutan en el torneo, como Koke, Diego Costa, De Gea o Azpilicueta. Al equipo de Del Bosque se le suman Alemania o Portugal como mejores representantes europeos.

Los germanos, cuya última conquista data de 1990, ya eran favoritos en Sudáfrica. Ahora, Joaquim Low cuenta con unos jugadores más maduros y que se han consolidado en la elite del fútbol europeo, como Müller, Khedira, Gotze o Toni Kroos. El que no estará en Brasil será Reus, que sufrió una rotura en los ligamentos de su tobillo izquierdo en el amistoso que enfrentó a su equipo y a Armenia.

Uno de los acompañantes de los teutones en el grupo G será Portugal, que buscará refrendar la buena imagen ofrecida en la Eurocopa de 2012 de la mano de su gran estrella: Cristiano Ronaldo, actual balón de Oro.

Francia, Inglaterra, Italia u Holanda parecen estar por debajo en el escalafón. Los galos han recuperado la ilusión con Deschamps en el banquillo, pero la baja de Ribery por lesión les resta experiencia y calidad. El extremo izquierdo de la Real Sociedad, Antoine Griezmann, suplirá al de Boulogne en el campeonato.

Ingleses e italianos forman parte del grupo D, considerado por muchos analistas como «el de la muerte» porque también incluye a Uruguay. Los británicos, acostumbrados a las decepciones en los últimos tiempos, no llegan a las semifinales de un torneo de naciones desde la Eurocopa de 1996 disputada en su país. En la última edición del torneo continental, la de 2012, fueron privados de diputar esa ronda por Italia, con quien se reencontrarán el domingo. Prandelli, el preparador italiano, confía en los Ballotelli, Marchisio, Verratti o Chiellini para lavar la imagen de la última cita mundialista, donde acabaron últimos de grupo en la primera fase.

La actual subcampeona del Mundo, Holanda, tendrá la oportunidad de vengar la final del Mundial de Sudáfrica, ya que se mide a España en la primera jornada del Grupo B. El conjunto tulipán tiene en el delantero Robin Van Persie su mejor argumento para llegar lejos. No obstante, la aportación de los más 'veteranos', como Robben, De Jong o Sneijder, se torna fundamental para dicho objetivo.

Equipos como Croacia y Bélgica están llamados a dar alguna sorpresa. Los balcánicos, que subirán el telón del Mundial el jueves contra Brasil, tienen en Modric y Rakitic a sus dos principales estiletes. Los belgas, por otro lado, vienen pisando fuerte. Wilmots cuenta con una nómina de talentos compuesta por futbolistas consolidados como Courtois, Hazard, Fellaini o Lukaku, referentes de grandes equipos europeos como Atlético, Manchester United o Chelsea.

Grecia, Suiza y Bosnia cierran el cupo de participantes de la Unión. A pesar de encontrarse lejos del nivel de las grandes favoritas, sus ilusiones son las de llegar, como mínimo, a octavos de final. En el caso bosnio el objetivo ya se ha cumplido al obtener su billete para Brasil. Dzeko e Ibisevic demostrarán que los ex yugoslavos no son ninguna cenicienta.

Rusia es el único país europeo no perteneciente a la Unión Europea que estará en el Mundial. Fabio Capello lidera a una selección que pretende dar una buena imagen de cara a la próxima cita mundialista, que tendrá lugar en su país.

Brasil, Argentina y Uruguay, referentes sudamericanos

Brasil acoge el Mundial con un objetivo claro: conseguir su sexta corona. La convocatoria de Scolari ha levantado todo tipo de críticas en el gigante sudamericano, pues no incluye ni a Miranda ni a Filipe Luis, pilares básicos del Atlético de Madrid, subcampeón de Europa esta temporada. A pesar de ello, la 'Canarinha' posee jugadores con oficio y un corazón temible, como ya demostró en la Copa Confederaciones de 2013. Bajo palos, Julio César es inamovible para el técnico. En defensa, Marcelo y Dani Alves coparán las bandas, acompañando a los centrales Dante y David Luiz. En ataque, la magia correrá a cargo de Neymar, Hulk, Oscar y Ramires.

No lo tendrán nada fácil los brasileños. En su grupo, el A, Croacia, México y Camerún tienen mimbres para conseguir un nuevo «Maracanazo». El debut será este jueves frente a los europeos.

Argentina y Uruguay se postulan como posibles alternativas. La Albiceleste presume de ostentar el que puede ser el mejor ataque del campeonato: el compuesto por Messi, Higuain, Agüero, Lavezzi y Di María. Por eso la clave del éxito podría estar en la parcela defensiva, la línea más débil del combinado de Sabella, la culpable, quizá, de los recientes tropiezos mundialistas del mismo. Por su parte, la Celeste, encuadrada en el grupo de Italia e Inglaterra, necesitará los goles del pichichi de la Premier, Luis Suárez, pretendido por clubes de media Europa. El delantero llega en un momento de forma inmejorable, habiendo conseguido la Bota de Oro esta temporada junto a Ronaldo. Además, estará secundado por Cavani, segundo máximo artillero de la Ligue 1 francesa, tan solo superado por Ibrahimovic. Atrás, Godín liderará una zaga de garantías completada por Lugano, Cáceres y Pereira.

Chile y Colombia desempeñan el mismo papel que Bélgica y Croacia. Son equipos de segunda línea que pueden incendiar el torneo. El conjunto andino ha caído en el grupo de Holanda y España pero en su juego rápido y atrevido no habrá sitio para el miedo. El combinado cafetero ha perdido a Radamel Falcao pero seguirá siendo muy peligroso gracias a Jackson Martínez y al sevillista Bacca. Ecuador es la selección sudamericana más débil de las que acuden a la cita, pero haberle tocado en suerte Francia, Suiza y Honduras le da posibilidades de estar en octavos.

Norteamérica estará representada por México y Estados Unidos. Los verdes, campeones olímpicos, no podrán contar con Carlos Vela, lo que les resta posibilidades en un grupo donde Croacia y Brasil se postulan como favoritas. Los segundos deberán hacer frente a Alemania, Portugal y Ghana, lo que desciende sus posibilidades de clasificar para la segunda fase.

Costa Rica y Honduras ya cumplieron con el sueño de participar en este torneo y buscarán conseguir, al menos, una victoria para el delirio de su hinchada.

Asiáticos y africanos buscan codearse con los mejores

Las participaciones de Corea del Sur y Senegal en 2002 o la de Ghana en 2010 son las referencias para los combinados asiáticos y africanos de cara a la cita mundialista de Brasil.

Los propios ghaneses y Costa de Marfil son los participantes africanos más fuertes. Estarán acompañados por Argelia, Nigeria y Camerún. Para cualquiera de los cinco, estar entre los dieciséis primeros sería una buena noticia.

Japón, con nombres como Kagawa, Honda o Nagatomo, luchará con Colombia, Grecia y Costa de Marfil por el primer puesto del grupo C. La selección nipona lidera la representación de una Federación Asiática de Fútbol que también envía al Mundial a Corea del Sur, Australia e Irán.