Francia se suma, con reservas, a la petición de Estados Unidos, Reino Unido y otros aliados para que la OTAN dirija la operación internacional para establecer una zona de exclusión aérea sobre Libia y evite las muertes de civiles, pero también pide un mando político aliado.
El ministro francés de Exteriores, Alain Juppé, ha dicho este martes en la Asamblea Nacional que debería haber una dirección política en la intervención militar, formada por los jefes de la diplomacia de los países que participan y los de la Liga Árabe.
El presidente Barack Obama ha asegurado que Estados Unidos, Francia y Reino Unido han llegado a un acuerdo para que la OTAN juegue un «papel clave» en el mando de la operación, sobre todo, en «la utilización de sus estructuras en apoyo de la coalición».
El ministro francés ha anunciado la celebración de una reunión en los próximos días, en Bruselas, París o Londres para concretar los términos. De momento, la OTAN ha decidido poner en marcha el embargo naval impuesto a Libia por Naciones Unidas y sus barcos y aviones realizarán tareas de seguimiento y, si es necesario, de interceptación de barcos sospechosos de transportas armas o mercenarios a territorio libio.
Alemania, contraria a la participación de la organización militar en Libia, ha reaccionado a esta decisión de forma inmediata y ha retirado todas sus fuerzas de las operaciones de la OTAN en el Mediterráneo y las ha puesto bajo mando alemán.
El Congreso autoriza la participación española
El presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, ha dicho en el Congreso que ve «con buenos ojos» que la misión pase a estar bajo mando de la OTAN, aunque ha reconocido que también«trabaja cómodamente con el liderazgo de Estados Unidos». El Congreso ha autorizado hoy la participación española en la coalición internacional, con los únicos votos en contra de Izquierda Unida y el BNG.
La ministra de Defensa, Carme Chacón, en declaraciones a TVE, ha dicho que el mando de la operación está claro: «Estados Unidos sigue estando al frente de la intervención y el mando del embargo naval lo tiene la OTAN».
Chacón ha rechazado cualquier comparación entre la intervención en Libia y en Iraq. Asegura que aquella «fue ilegal»y que «nos llevaron con mentiras, las de las famosas armas de destrucción masiva que nunca existieron».
Los leales a Gadafi avanzan entre los bombardeos aliados
La noche del martes han vuelto a escucharse de nuevo las bombas aliadas en Trípoli y la respuesta de las baterías antiaéreas de Gadafi. Los ataques de la coalición internacional no han conseguido frenar el avance de sus leales, que se han hecho fuertes en la ciudad de Misrata, la tercera del país. Según algunas fuentes, 40 personas han muerto allí, entre ellas, cuatro niños de la misma familia.
Tampoco los rebeldes han conseguido afianzarse en Ajdabiya, tras haber perdido el control de la ciudad la semana pasada y avanzar en los primeros momentos de los ataques internacionales. Eso en el Este de Libia, en el Oeste tampoco las cosas van mejor para los rebeldes. Las fuerzas de Gadafi han bombardeado la ciudad de Zintán, donde habrían muerto, al menos, diez personas.