La élite económica y política ha comenzado su encuentro anual en la ciudad suiza de Davos para dar sus respuestas a la crisis mundial. En la inauguración del Foro Económico Mundial, la canciller alemana, Angela Merkel, sin embargo, no ha aportado nuevas fórmulas para superar la crisis de deuda de la eurozona. Al contrario, se ha mantenido firme frente a quienes piden más dinero para los fondos de rescate. En Alemania, ha dicho Merkel, no queremos compromisos que no podremos cumplir.
Merkel ha recordado que algunos piden que los fondos para rescatar a países con dificultades se dupliquen, incluso se tripliquen para tranquilizar a los mercados, «y yo me pregunto por cuanto tiempo esto será creíble o cuando ya no lo será».
La canciller cree que Europa ya ha perdido mucha confianza por no cumplir sus promesas. «La confianza es la moneda más importante que uno puede tener en el mundo en este momento», ha dicho.
Segura de que Alemania está haciendo lo correcto, Merkel ha pedido a los países europeos que cedan más competencias para garantizar el futuro europeo y que mejoren su competitividad porque «solo así tendremos una oportunidad dejugar un papel en los mercados mundiales».
Sin embargo, se ha mostrado optimista sobre la superación de la crisis financiera y, a preguntas de los asistentes, ha dibujado una futura Unión Europea en la que la Comisión funcionará como un gobierno central y la mayoría de los países estarán en la moneda única. Merkel señaló que le gustaría decir a un joven europeo que dentro de 20 años habrá vivido en diferentes países europeos y tendrá derecho a una jubilación.