Varios países del centro y el norte de Europa se enfrentan a unas condiciones meteorológicas consideradas excepcionales para el mes de marzo. El mal tiempo está perturbando el espacio aéreo europeo y las comunicaciones por carretera y ferrocarril. Los mayores problemas se centran en los aeropuertos de París, Bruselas, Fránckfort y Londres. En Francia han accionado el gabinete de crisis y han pedido a los aprisinos que no vayan a trabajar.

El aeropuerto de Fránckfort, uno de los más afectados, ha tenido que cerrar provisionalmente sus instalaciones tras cancelar más de 160 vuelos, tanto nacionales como internacionales. También el Charles de Gaulle y el Orly de París se han llevado la peor parte, y han cancelado el 25 por ciento de los vuelos. En Heathrow la mayoría de los problemas están ocasionados por los retrasos y anulaciones de vuelos en el continente.

En Alemania varias carreteras están afectadas por la nieve y las bajas temperaturas han formado una capa de hielo muy peligrosa, lo que ha provocado varios accidentes. Una de las ciudades más afectadas es Aquisgrán. En el Reino Unido, cientos de conductores han quedado abandonados a su suerte,atrapados por la nieve y el hielo. En algunas carreteras de Sussex ha habido retenciones de varios kilómetros y centenares de pesonas han permanecido en esa situación durante ocho horas. En Bélgica los problemas se han centrado en la región de Lieja con carreteras colapsadas y sin que los equipos de limpieza puedan hacer nada, al haberse quedado atrapados entre el tráfico. Otro de los países más afectados por la nevada es Luxemburgo.

En Francia 29 departamentos del norte están en alerta naranja hasta el miércoles. El gobierno ha accionado la célula de crisis para coordinar a los ministerios afectados. Las autoridades parisinas han pedido a los trabajadores que sólo acudan a sus puestos de trabajo si es imprescindible. El departamento de La Mancha está en alerta roja, y en algunas zonas de los Alpes la nieve caída supera el medio metro. En Somme, la prefectura ha señalado que «todas las carreteras están impracticables y se desaconseja el uso de vehículos. En Italia el mal tiempo, a parte de provocar problemas, ha deslucido el inicio del cónclave en el Vaticano.

Portugal, también sufre los efectos de una borrasca, que afecta principalmente a las provincias del sur del país. El mismo temporal que está azotando las costas de Cádiz y Ceuta. Ambas zonas marítimas están en alerta naranja por vientos de fuerza ocho y mar gruesa, lluvias de hasta 40 litros por metro cuadrado en 12 horas y rachas de 80 kilómetros/hora.

En España, la nieve, la lluvia, el viento y el fuerte oleaje mantienen en alerta a una treintena de provincias. Las nevadas mantienen en alerta amarilla a más de 20 provincias, la mayoría de ellas en el tercio norte: Lugo y Ourense en Galicia; Asturias; Cantabria; las tres provincias del País Vasco; Navarra; La Rioja; Zaragoza y Huesca en Aragón; Barcelona, Girona y Lleida en Cataluña; Ávila, Burgos, León, Palencia, Segovia, Soria y Zamora en Castilla y León; Cáceres y Granada y Jaén en Andalucía.

Aunque este invierno no ha sido especialmente «crudo» como el anterior, si ha sido largo, El 28 de octubre las primeras nevadas provocaban el caos en varios países y ahora en marzo, otro temporal, este tardío, ocasiona problemas similres.