La Oficina Europea de Patentes ha destacado la labor de cinco inventores europeos, concediéndoles el Premio al Inventor Europeo 2013. Entre los galardonados se encuentra el español, José Luis López Gómez. Este ingeniero burgalés, ha perfeccionado un sistema electrónico que permite al Talgo mayor estabilidad a gran velocidad. La nueva tecnología también ayuda a reducir el consumo de energía, desgaste prematuro y reduce los costes de mantenimiento.
Grandes inventos de la humanidad han sido ideados y diseñados por europeos. La crisis no ha afectado a estas mentes privilegiadas que siguen trabajando para mejorar la vida diaria de millones de personas o productos especiales que los que ofrecen un valor añadido. El premio al mejor invento ha sido para las pantallas de cristal líquido (LCD), del suizo Martin Schadt. Los austríacos Claus Hämmerle y Klaus Brüstle, han ganado en la categoría de industrial con una bisagra antiruido para muebles de cocina. Su invento «Bluemotion» se ha convertido en un estándar del sector.
También ha habido premios para la ciencia. El sueco Pål Nyrén ha obtenido el de pequeñas y medianas empresas por inventar la pirosecuenciación, un método mucho más rápido, menos complicado y más barato de secuenciar cadenas de ADN. Su combinación ha abierto nuevas vías para la investigación de tratamientos personalizados en enfermedades mortales. La Universidad de Paris-Sud, ha visto como uno de sus equipos ha obtenido el premio de investigación por inventar las nano-cápsulas, que son 70 veces más pequeñas que los glóbulos rojos y está protegido por un recubrimiento biodegradable que destruye las células cancerosas sin dañar el tejido sano.
La oficina Europea de Patentes también ha destacado la importante innovación que ha supuesto el USB (Conexión de serie universal), que hoy está incluida en miles de millones de dispositivos electrónicos de todo el mundo. sus inventores son los estadounidenses Ajay Bhatt, Bala Sudarshan, Jeff Morris, Shaun Knoll y Shelagh Callahan. Para ellos ha sido el premio que se otorga a inventores no europeos.
El presidente de la EPO, Benoît Battistelli ha dicho que «la innovación es la clave para preservar la calidad de vida y la prosperidad económica en Europa» y ha destacado que los inventores premiados han sabido encontrar soluciones ingeniosas a los desafíos de nuestro tiempo, demostrando «el impulso de una Europa creativa con espíritu inventivo». José Luis López recordó una frase de su hermano que le había dicho que «sería difícil desarrollar algo nuevo, porque ya está todo inventado». Sin embargo, dijo López Gomez, «todo puede ser optimizado para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos».
El premio se otorgó en el antiguo edificio de la bolsa de Amsterdam, la Beurs van Berlage.