La Unión Europea, apoyó su desarrollo inscribiéndolo en el Séptimo Programa Marco (2007-2012) En la búsqueda de Ideas potentes, capaces de conseguir nuevos conocimientos que cambien nuestra visión del mundo y nuestro modo de vida, el plan GLORIA parecía hecho a medida. Sí, GLORIA, convenció a Europa para hacer Ciencia Ciudadana.

El principio no fue fácil. Francisco Sánchez, de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), es el coordinador: «En 2010, nos echaron abajo el proyecto. Bruselas entendía que la Investigación era para científicos, no para el público en general. El interés, ¿curiosidad?, que despertamos en Bruselas permitió que, un año después, modificaran la convocatoria para darnos cabida. De pronto, cualquier ciudadano podía operar un telescopio desde su ordenador o teléfono móvil. La red ahora disponible -diecisiete telescopios repartidos por todo el planeta- permite comprobar que había un vacío en este campo. Son cientos de miles de usuarios los que reservan día y hora. Astrónomos aficionados, profesores, estudiantes y también investigadores, acceden a un telescopio en un clic. El servicio es gratuito. GLORIA se ha convertido en una herramienta al servicio de todos, una herramienta hasta hace muy poco tiempo tan escasa como costosa»

Gloria tiene en España su jefe de filas. Trece socios y siete países en Europa, trabajan para consolidar el proyecto. Las emisiones en directo de espectáculos celestes – auroras boreales desde Groenlandia, eclipses totales desde Australia o Kenia y tránsito de Venus en Australia- han obtenido una respuesta ciudadana sin precedentes en este campo. Las audiencias de los directos de GLORIA/SHELIOS eran impensables.

De nuevo, el carácter global, la «mundialización» que persigue Europa es un factor determinante. Los telescopios de GLORIA han conseguido, además, captar imágenes inolvidables, como la primera desde Tierra del asteroide 2012-DA14 y colaborado en la observación de la última del cometa ISON, también desde nuestro planeta.

GLORIA , finalizará a mediados de 2014. Francisco Sánchez y su equipo hacen un primer balance: «La red GLORIA es un cambio de metodología , un cambio en la manera de actuar. Teníamos las herramientas y hemos demostrado qué se puede hacer combinándolas. Eso es lo fundamental que hemos aportado. El cambio más destacable se observa en las personas que participan en el proyecto: ahora ven que esta metodología de trabajo es revolucionaria y puede generar conocimiento mucho más rápido»

Pensando en el futuro, ya con el Cielo abierto, Gloria inspira nuevas líneas de trabajo. Sánchez es optimista: «Yo personalmente estoy muy interesado en lo que está emergiendo ahora que se denomina comunidades autoorganizadas y bancos de horas. Creo sinceramente que esto va a producir cambios muy importantes en nuestra sociedad. Pero no porque se esté inventando nada nuevo, sino que el cambio se va a producir en la forma que vamos a hacer las cosas»