En el conflictivo Oriente Medio, las minorías étnicas o religiosas son amenazadas, atacadas y expulsadas de sus países de origen por organizaciones extremistas como Al Qaeda y Estado Islámico. Un nuevo estudio publicado por la organización independiente Minority Rights Group International, con sede en Londres, sostiene que el mayor riesgo procede de sus propios gobiernos.
«No me atrevo a decirle quiénes son los asesinos aquí, pero sí que su objetivo somos nosotros, los turcomanos», se desahoga Ahmed Abdulah Muhtaroglu, junto al retrato de su hermano asesinado en 2013 en Iraq.
Muhtaroglu nos recibe en Tuz Jormato, un distrito ubicado 170 kilómetros al norte de Bagdad donde la etnia turcomana es mayoría.