Organizaciones de derechos humanos han presentado evidencias de que Grecia, Italia y Egipto están deteniendo y expulsando ilegalmente a refugiados sirios. Los informes han sido presentados por la organización alemana Pro Asyl, las italianas MEDU y Asociación para Estudios Legales sobre Migración (ASGI, por sus siglas en italiano), y la internacional Human Rights Watch (HRW).
La UE recuerda la obligación de atender a los demandantes de asiloAntes de que termine 2013, el país balcánico podría recibir más de 11.000 refugiados sirios. Su cercanía geográfica con Siria le sitúa como la esperanza europea para salir del terror de una guerra civil que dura ya años y con pocas esperanzas de un próximo final.
La escasez de alimentos ha alcanzado niveles extremos en el campamento para refugiados de Yarmuk, en la capital siria. Los líderes religiosos islámicos han tenido que emitir una «fatua» (edicto) permitiendo matar y comer gatos, perros, ratones, ratas y monos.
La Comisión contra el racismo del Consejo de Europa ha pedido a los gobiernos europeos que refuercen la lucha contra la intolerancia y el racismo. Los miembros de la comisión han mostrado su preocupación por el auge de partidos xenófobos en Europa.
«Es igual que una cárcel. Un día allí son como 100 años», dice la nigeriana Jennifer, de 35 años, refiriéndose a lo que tuvo que soportar su tía en el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Málaga, antes de ser deportada. Quizá sea peor que una cárcel.
El mundo islámico celebró esta semana una de sus festividades más sagradas: Eid al Adha (Fiesta del Sacrificio), con grandes reuniones familiares, comidas abundantes e intercambio de obsequios. En esta solemnidad, en la que se recuerda la disposición de Ibrahim (en la Biblia, Abraham) de inmolar a su hijo Ismael en honor a Alá, se sacrifican corderos y reses, y su carne se dona a los pobres.
Tras el naufragio de una embarcación cerca de Malta el pasado viernes y la llegada de más inmigrantes a España escondidos en un contenedor, la UE se ve obligada a estudiar formas de replantear su control de las fronteras marítimas en los países del sur