La Comisión Europea ha advertido a España de que con los presupuestos que ha preparado para 2014 no cumplirá el objetivo de déficit, a Francia le dice que tendrá que cumplir el presupuesto a rajatabla porque no tiene «margen de maniobra» y a Italia le hace una llamada de atención por su enorme deuda. Es la primera vez que Bruselas revisa los presupuestos de los Estados miembros antes de que estos sean aprobados por los respectivos Parlamentos.

Después de más de 16 horas de negociaciones y a punto de cumplirse el plazo límite, este miércoles, el Parlamento, la Comisión y los veintiocho han cerrado el presupuesto de la UE para 2014. Será de 135.500 millones de euros en los pagos y 142.600 millones en los compromisos, un 9 por ciento menor que el presupuesto de 2013.

¿Se imaginan todos los edificios de la UE en Bruselas apagados totalmente, por falta de acuerdo entre el Parlamento y la Comisión? ¿Se imaginan a los eurofuncionarios en su casa, sin cobrar por «cierre patronal»? Pues si no se lo imaginan, tampoco lo verán, porque la Comisión Europea ha descartado un cierre administrativo como el de Estados Unidos ante las diferencias entre el Consejo Europeo y el PE.

17.471 millones de euros de ajuste que tendrán que soportar sobre todo las comunidades autónomas y los ayuntamientos es lo más llamativo de los presupuestos para 2014. Como está previsto en la normativa de la Comisión Europea, en el llamado 'two pack', España ha enviado su presupuesto para el año próximo a Bruselas para que sea estudiado y se verifique si cumple con los parámetros necesarios para la corrección del déficit excesivo. La Comisión contestará en noviembre.