Israel sigue instando a las potencias que negocian con Irán a no aceptar menos que un desmantelamiento completo del programa nuclear de ese país. Sin embargo, el primer ministro Benjamín Netanyahu se vería obligado a moderar su demanda.
El buen resultado de las últimas conversaciones con Irán en Ginebra ha representado un revés para los políticos de línea dura en Estados Unidos que se oponen a la distensión, que están aún lejos de rendirse. Los 'halcones' presionan duro al Congreso legislativo, donde gozan de gran influencia, para que apruebe una nueva serie de sanciones antes de la siguiente ronda de conversaciones entre Teherán y el P5+1 (China, Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña y Rusia más Alemania), el 7 y 8 de noviembre en la ciudad suiza.