Evitar financiar de manera ilícita ejércitos y otros grupos militares en zonas en conflicto es el objetivo de la votación que tiene lugar este martes en la comisión parlamentaria de Comercio Internacional. Los eurodiputados votan un proyecto de reglamento que establece un sistema europeo de autocertificación en la cadena de suministro de estaño, tantalio, wolframio y oro originarios de zonas de conflicto y de alto riesgo..
Por primera vez, cerca de 1.300 empresas de EE UU informaron sobre si los productos que fabrican o venden contienen minerales que financian los conflictos armados en la región de los Grandes Lagos de África central. Ha sido el primer resultado concreto de una ley aprobada en 2010 para ayudar al cese de la prolongada guerra civil en República Democrática del Congo (RDC).