Los territorios ucranianos surorientales que se están desmembrando ahora mismo son los adheridos a la URSS en su creación y nunca han sido pro-occidentales. Tras la guerra entre nacionalistas ucranianos y pro-bolcheviques (1917-22) por el control de Ucrania al disolverse el imperio ruso, la parte occidental de Ucrania quedó adherida a Polonia, la que en un intento de frenar el avance soviético hacia el oeste entró en guerra con la parte soviética, y el resto se constituyó en la República Socialista Soviética de Ucrania dentro de la URSS, la que se conformó con el Tratado de la Unión en 1922.