Un acuerdo con Irán sobre su programa nuclear podría mejorar considerablemente la influencia de Estados Unidos en Medio Oriente, según un nuevo informe firmado por 31 exfuncionarios de la política exterior estadounidense y expertos en la región.
Los políticos y asesores conservadores que apoyaron la guerra de Estados Unidos contra Iraq en 2003 no logran persuadir a la población y al Congreso legislativo de la necesidad de una nueva intervención militar en aquel país, pese a su omnipresente presión en los medios de comunicación.
Si el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, organizara sus perspectivas de política exterior para 2014 como algún popular videojuego infantil, las «serpientes» que tendría que sortear superarían con mucho a las ayudas que lo llevarían hasta la meta.