El primer ministro italiano, Enrico Letta, ha ganado la moción de confianza en el Parlamento con el apoyo de Silvio Berlusconi quien después de haber obligado a los ministros de su partido a dimitir y haber anunciado la ruptura de la coalición de gobierno en varias ocasiones ha dado marcha atrás y ha votado a favor de Letta cuando se ha visto solo y abandonado incluso por los suyos.