En 2016 habrá 210 millones de vehículos conectados en el mundo y el coche se habrá convertido en la cuarta pantalla más utilizada, después de la televisión, los ordenadores, y dispositivos móviles como smartphones y tablets. Para el 66% de los usuarios la tecnología que incorpora un coche es más importante que el rendimiento del vehículo.
La tecnología en la que se sustenta el diseño de los vehículos eléctricos mejora sin cesar; tanto es así, que la Unión Europea prevé que en 2020 ya se podrán producir en serie. El proyecto europeo DATA SIM ha simulado las consecuencias de una sustitución masiva de los vehículos convencionales por eléctricos y ha estudiado la repercusión de tal acontecimiento sobre la movilidad y las redes de distribución eléctrica. Con ese propósito ha ideado una forma radicalmente nueva de aprovechar la información facilitada por GPS y los datos de ubicación mostrados por GSM.
Según un estudio promovido por Ecologistas en Acción «Las cuentas ecológicas del transporte», desde el año 2000 hasta 2010 el Estado español ha incrementado en 5.500 km su red de autovías y autopistas, en torno a 552 km anuales. España lidera el ranking de kilómetros de carreteras de gran capacidad con 14.554 km, muy por encima de países de la UE con mayor dimensión geográfica como Alemania con 12.845 km o Francia con 11.412km.
Imagine que llega apresuradamente a una estación de ferrocarril para tomar un tren pero que, antes de entrar, tiene que meter su coche eléctrico en el aparcamiento. Perdería un tiempo precioso buscando una plaza libre (idealmente, en la que pueda recargar el vehículo)... Con V-CHARGE, los conductores podrán bajarse del coche en la entrada del aparcamiento y activar el proceso de estacionamiento del automóvil mediante una aplicación de smartphone.
Gracias al Plan PIVE, España se consolida como el país con mayor crecimiento de matriculaciones en Europa, rozando el medio millón de vehículos en los seis primeros meses del año. El sector del automóvil ha sido uno de los más perjudicados por la crisis, las diferentes ayudas europeas y estatales han conseguido que las cifras del automóvil vuelvan a crecer en el viejo continente.
Todavía queda un largo camino por recorrer para conocer el verdadero alcance tecnológico de todos los componentes de los coches eléctricos. Mejorar la vida útil, eliminar fallos, y lograr unos motores tan potentes como los de los coches de gasoil y gasolina son algunos de los retos que plantea esta nueva tecnología. El proyecto europeo HEMIS, investiga desde su sede de San Sebastián cómo impulsar el vehículo eléctrico, consiguiendo una tecnología más eficiente, fiable, segura, asequible y fácil de mantener.