Nunca antes Madrid y Lisboa estuvieron tan cerca. O al menos, nunca antes tantos madrileños coincidieron en la capital de Portugal. La razón, a esta altura de la temporada, a nadie se le escapa: la Final de la Champions, que se juega el sábado 24 de mayo. El fútbol, sí. Cosas de los resultados, de los emparejamientos, de la suerte o de la fortuna, por primera vez en la historia dos equipos de una misma ciudad (Atlético de Madrid y Real Madrid, en este caso) se disputan el máximo trofeo continental. Que la sede del partido sea Lisboa da aún mucho más ambiente al partido.