Los datos son de la Cámara de Comercio de Barcelona y reflejan que España es el único gran país europeo en el que el empleo en la administración púbica ha crecido en los últimos dos años y medio, mientras en otras economías europeas con dificultades, como Italia, Grecia y Portugal se ha reducido y en Alemania solo ha aumentado un 0,2%.
Desde 2008 se han creado 156.000 puestos de trabajo y, si se toma como referencia la última década, el número de empleados públicos ha crecido en casi 460.000 personas, pasando de de 966.000 personas en el año 2.000 a 1.425.750 en 2011. En otros sectores, sin embargo, la crisis ha provocado un fuerte ajuste del empleo, que ha caído un 12% acumulado entre 2008 y el primer semestre de 2011.
Según los cálculos de la Cámara de Barcelona, el coste del empleo público ha registrado un incremento nominal del 68,5% en los últimos diez años, pasando de los 1.600 euros por habitante en el año 2000 a 2.700 euros en 2010, 320 más de lo que paga un ciudadano alemán.
Si se descuenta la evolución de la inflación, la variación real del coste por habitante ha sido del 35% en España, mientras en el conjunto de los 27 ha aumentado un 13% y en Alemania ha sido negativa.
La Cámara considera necesario reajustar la dimensión de las administraciones públicas en España para ganar eficiencia y, aunque sigue siendo inferior al tamaño de las de Alemania o Francia, cree que el fuerte incremento del coste de personal no es justificable si no va acompañado de una mayor productividad.