Los datos están recogidos en el V Informe Anual de Migración y Asilo (2013) de la Comisión Europea que ha sido remitido al Parlamento. España fue el año pasado el país de la Unión Europea que más impidió la entrada a inmigrantes, denegando el acceso hasta a 317.840 personas, un 0,6% más que en 2012. En total, un 61% de ellas recibió la negativa de las autoridades españolas.

Solo en 2013, las solicitudes de asilo en la UE subieron a 434.160, 100.000 más que el año anterior, y el 12% procedía de ciudadanos de Siria. De los 2,3 millones de sirios que han huido del país desde que estalló el conflicto en 2011, sólo 82.730 han pedido protección a la UE. También han sido numerosas las solicitudes de asilo cursadas por nacionales de Rusia, Afganistán, Serbia, Paquistán y Kosovo.

Llamativas también son las cifras en cuanto al número de menores no acompañados que solicitaron protección internacional, 12.425 solicitudes, cifra similar a 2012. De éstas, los grupos más amplios procedían de Afganistán (3.310), Somalia (1.580), Siria (1.010) y Eritrea (715). La mayoría de las peticiones fueron aceptadas en Suecia, Alemania, Reino Unido, Austria e Italia.

De los 503 millones de habitantes de la UE, un 4% o lo que es lo mismo 20,4 millones de personas son de terceros países. Solo en 2012 se concedieron, 2,1 millones de permisos de primera residencia, de los que un 32% fue por reagrupación familiar, un 23% para trabajar, el 22% por estudios y el 23% por otras razones (incluida la protección internacional).

Los beneficiarios de estos permisos de residencia procedían de Estados Unidos (200.000, el 9,5% del total), Ucrania (163.000), China (163.000) y la India (157.000), cada uno de los cuales representa el 7 o 7,5% del total. Mientras, entre el 5 y el 2,5% de las autorizaciones se concedieron a nacionales de Marruecos (102.000), Rusia (66.000), Filipinas (62.000), Turquía (59.000) y Brasil (51.000). «Ha habido avances importantes en ciertas áreas de gestión de la migración (...) La UE debe emprender una labor decidida para impedir que los inmigrantes pierdan la vida intentando alcanzar las costas europeas y redoblar el combate contra la delincuencia organizada», destaca el informe.

Disminución del número de detenciones de inmigrantes

El año pasado llegaron por vía marítima 40.000 personas a la UE, de las que 600 se cree que perdieron la vida en el intento, de las que más de 360 lo hicieron junto a la isla italiana de Lampedusa en la catástrofe humanitaria del 3 de octubre. En total, los diferentes estados interceptaron a 77.140 personas entre enero y septiembre de 2013 que intentaban cruzar ilegalmente las fronteras de la Unión Europea. La cifra aumentó a partir de julio debido a la crisis en Siria.

El informe también señala que en 2013, disminuyó el número de detenciones de inmigrantes, con 386.230 personas frente a las 433.665 del año anterior en toda la UE. Por otro lado, los gobiernos efectuaron la devolución a terceros países de 166.470 ciudadanos extracomunitarios, «la UE debe garantizar la seguridad de las fronteras de Europa con adecuados canales legales de entrada» y «debe redoblarse el trabajo para combatir la violencia y la discriminación contra inmigrantes», según han declarado fuentes de la Comisión Europea.

El informe ofrece además información sobre el dinero que la Comisión Europea ha destinado a los Estados miembros en concepto de medidas de emergencia para migraciones y asilo, especialmente en relación al éxodo de ciudadanos sirios. 8 estados miembros recibieron fondos por importe de 36,34 millones de euros en este sentido. Entre los que destacan, Grecia (82,7 millones), Chipre (2,7 millones) o Bulgaria (5,56 millones).