Son los requisitos para enfilar el camino de la salida de la crisis y la recuperación del empleo han dicho los componentes de una delegación de la Comisión de Empleo y Asuntos Sociales del Parlamento Europeo que se encuentra en España para estudiar el problema del enorme paro juvenil.
Tras un encuentro con la secretaria de estado de Empleo, Engracia Hidalgo, la presidenta de la delegación europea Pervenche Berés, ha planteado la necesidad de que España examine por qué el diálogo social, necesario también en las empresas, «no permite que se salga de la crisis».
«Vemos -ha dicho Berés- que en los países en los que se ha luchado con éxito contra el desempleo juvenil, el eje de ese éxito se ha basado en la calidad del diálogo social», ha recalcado que el éxito de ese diálogo no consiste solamente en que se hable, sino en que los empresarios se comprometan a cumplir con su parte, «un contrato de aprendizaje como es debido y una adecuada protección de los derechos sociales de los trabajadores».
Los europarlamentarios han señalado la importancia de que se ponga en marcha lo antes posible la Garantía juvenil, impulsada por la UE que trata de garantizar que todos los jóvenes menores de 25 años tengan una oferta de trabajo, formación o prácticas antes de que transcurran cuatro meses desde que terminaron los estudios o perdieron su trabajo.
Berés ha insistido en el ministerio de Trabajo que esta «es una medida urgente muy necesaria en España» tanto que le ha dicho a Hidalgo que «presione» en Bruselas para obtener lo antes posible los fondos necesarios.
La UE ha destinado 6.000 millones de euros con cargo al Fondo Social Europeo para el próximo presupuesto plurianual de siete años, aunque los primeros 3.000 euros estarán disponibles este año. Los diputados europeos opinan que los países con tan alto paro juvenil como España, deberían poder utilizar esos fondos ya para atajar el problema y que para ello deben insistir ante Bruselas.
Al referirse al debate entre austeridad y crecimiento, Berés ha dicho que Europa debe corregir los desequilibrios existentes entre norte y sur, centro y periferia, sin perder de vista que corregir los desequilibrios de déficit es muy importante, pero que no lo es menos solucionar las cuestiones sociales.
Berés ha señalado que «no puede haber solamente una Europa de sanciones, sino también una de solidaridad y apoyo», ha añadido que «una estrategia basada solamente en la austeridad y el coste del trabajo no tendrá éxito para salir de la crisis ni en Europa ni en España».